El equipo de Cleveland Browns fue una de las grandes decepciones en la temporada pasada. La contratación de Odell Beckham Jr. y la confirmación de Baker Mayfield como mariscal franquicia al mando de la ofensiva daban grandes esperanzas a los fanáticos. Sin embargo, malas decisiones tomadas por el staff técnico y factores quizás extra deportivos, hicieron que las derrotas se acumularan en la campaña y el equipo terminó el año con récord negativo y muchas dudas por responder.
Por esto, algunos movimientos incluso antes que llegara la temporada baja fueron rápidos y de cirugía mayor. Despidieron al entrenador en jefe Freddie Kitchens, en su lugar contrataron a Kevin Stefanski y también reemplazaron a su gerente general, este draft será el primero a las órdenes de Andrew Berry.
Los Browns mantienen un roster sólido, el mismo que el año pasado los había posicionado como contendientes. No obstante, tienen huecos para cubrir y puestos que reforzar, pero esta es una clase de draft muy talentosa que realmente genera la expectativa de encontrar buenos jugadores, incluso en el segundo y tercer día. Cleveland cuenta con siete selecciones en total: la número 10 en primera ronda, 41 en segunda, 74 y 97 en tercera, 115 en cuarta, 187 en sexta y 244 en la séptima y última ronda del draft.
Primera obligación, mejorar la línea ofensiva: (OT)
Las necesidades del equipo empiiezan por darle protección a su mariscal. Un tacle izquierdo de élite es indispensable para darle tiempo a Mayfield, o abrir espacios para Nick Chubb. Es muy probable que Cleveland apueste por Andrew Thomas (LT, Georgia) si se encuentra disponible. Otra posible opción sería Tristán Wirfs (OT, Iowa).
Si no estuvieran disponibles ninguno de los dos, hay fuertes rumores que Atlanta Falcons necesita escalar y un trade por su pick 16 y sumar algún otro en tercera o cuarta ronda sería viable. Aunque ciertamente, no se espera que lo Browns dejen caer demasiado su primera selección. Otro nombre que suena fuerte para la segunda mitad del primer día del draft podría ser Ezra Cleveland (OT, Boise State).
Es necesario mejorar la cobertura en la defensiva: (LB-S)
Cleveland quizá se lleve más de un linebacker en sus elecciones. La salida de Joe Shobert dejó por el momento el puesto en manos de Mack Wilson y Sione Takitaki quienes en su segundo año en la NFL deberán dar un paso adelante para quedarse con la titularidad. Por este motivo, los Browns deben buscar más opciones y ponen todas sus fichas en encontrarse en la segunda ronda con la posibilidad de elegir a Zach Baun (LB, Wisconsin) o Kenneth Murray de Oklahoma. O en tercera a Troy Die de Oregon. Ante el revés que sería no hacerse de un linebacker pronto, el GM Berry estaría dispuesto a ir por algún profundo, también necesario para elevar el nivel de la defensiva. Lo cierto, es que Cleveland necesita encontrar rápidamente un líder en la defensa y seleccionar a Grant Delpit (S, LSU) en segunda ronda sería un gran premio, aunque quizás una oportunidad más realista en dicha ronda sea Ashtyn Davis (S de California).
Tercera necesidad, alas abiertas para ganar: (WR)
Es cierto que en OBJ y en Jarvis Landry los Browns tienen a dos grandes receptores y que contrataron en la agencia libre al ala cerrada Austin Hooper, pero en una nueva ofensiva, con nuevo head coach siempre es útil buscar opciones que renueven la plantilla. OBJ es una estrella que aún tiene resultados por demostrar, y como se ha dicho ya, esta camada de draft está repleta de talento aún más si se trata de receptores. Entonces es probable que se busque algún refuerzo en el ataque con los picks de cuarta ronda, o sino, en el úlitmo día del draft. Los nombre más sonados son: Chase Claypool de Notre Dame y Devin Duvernay de Texas.
Cleveland afrontará una temporada con altas exigencias. Quizás su mejor oportunidad se da porque los reflectores ahora no apuntan directamente sobre ellos, y con un nuevo entrenador en jefe que deseará tener algo más de tiempo para trabajar y buscar buenos resultados.
Empecé a seguir la NFL allá por 1989, y por el encanto que tiene la ciudad de Seattle de inmediato me convertí en fanático de los Seahawks. Escribo crónicas periodísticas y participo de los podcasts. Me obsesiona la estrategia que domina al football americano tanto dentro como fuera del campo de juego. Creo que la NFL representa al deporte del futuro en su combinación exacta de fuerza, habilidad e inteligencia.
