La NFL quizás sea la liga más apasionante del planeta. Atletas de elite, jugadas que parecen imposibles de realizar por seres humanos normales y definiciones increíbles que tranquilamente podrían estar sacadas de la más inverosímil de las películas hollywoodenses.
Si llegaron hasta acá, probablemente sepan de lo que estoy hablando. Sin embargo, en esta oportunidad me toca presentarles un tema que sorprendentemente no todos conocen: el Fantasy Football.
Para empezar, déjenme decirles que esto no es algo muy agradable e incluso hay quienes podrían considerar que al introducirlos en este mundo les estoy arruinando la vida. Procedan con cuidado bajo su propia responsabilidad.
Aunque seguramente esta definición pueda sonar demasiado liviana para sus fanáticos, la realidad es que se trata de un juego donde cada participante tiene que administrar un equipo integrado por jugadores reales de la NFL y los puntos que consiga semana a semana se basan exclusivamente en el rendimiento de estos en sus partidos de cada jornada.
Hasta acá suena bastante sencillo, pero les aseguro que no lo es. El Fantasy Football es una verdadera montaña rusa de emociones que lleva la experiencia de un simpatizante de este hermoso deporte mucho más allá de lo que se imagina. Las sensaciones se incrementan a niveles realmente ridículos y uno termina por dedicar muchísimo tiempo de su vida a esta competencia.
Basta con consultarle a cualquier veterano en la materia para escuchar las historias más impresionantes. Fanáticos empedernidos deseando que se luzcan jugadores en contra de su propio equipo, domingos enteros arruinados por la decisión de último momento de dejar en el banco a un receptor que atrapó tres pases de touchdown, rituales y cábalas llevadas hasta el límite de la cordura y mucho más.
Claro que no todo es tan negativo. También se puede disfrutar mucho, especialmente cuando las cosas salen bien, y se me ocurren pocos planes mejores que sentarse todo el día a ver NFL Redzone, siguiendo a tus jugadores y festejando cada yarda conseguida como si valiese mucho más que un puñado de puntos virtuales.
Lo bueno de esto, es que cada uno es libre de dedicarle el tiempo que quiera. Con tan solo ingresar un par de veces por semana es posible mantener un equipo competitivo o se puede ir a fondo y los esperaremos con los brazos abiertos en este insólito grupo de gente para el cual el Fantasy es prácticamente una forma de vida.
Además, desde No Huddle tenemos el agrado de invitarlos a participar de la querida Superliga Argentina de Fantasy. Un certamen que ya reúne a más de 100 participantes de nuestro país y todo el continente con un innovador sistema de ascensos y descensos para que la experiencia sea aún más apasionante. (También frustrante, pero no volvamos a ese camino).
Si estas palabras los tentaron los suficiente, ya pueden comenzar a inscribirse a través de nuestras redes sociales: @nflnohuddle y @fantasyarg en Twitter. Con el correr de los días, les brindaremos más información, pero estamos listos para responder a cualquier consulta que puedan llegar a tener.
¡Bienvenidos al Fantasy Football!
No sé desde cuando veo NFL, pero desde 2013 es solo un mal necesario para poder jugar al Fantasy Football, la razón de mi vida, el motor de mi existencia. De la mano de la Superliga, nos vamos a encargar de demostrar en No Huddle que todo es Fantasy.
