La posición de receptor abierto es sumamente importante para el Fantasy. Es muy difícil que puedas aspirar a playoffs si no tenés receptores decentes en tu plantel. La importancia está dada porque siempre en el roster titular debés contar con tres o cuatro receptores y si estos jugadores tienen malos rendimientos, es muy posible que salgas perdedor en tu matchup.
Hay muchos detalles que debemos tener en cuenta antes de una elección de un WR en el Draft que deberiamos estudiar previamente. Entre los pormenores más importantes están: Si es el WR1 de la franquicia o hay jugadores por encima de él que generen que le quiten toques; si su equipo tiene un buen o mal mariscal: un mal QB siempre puede provocar que tu jugador tenga menos recepciones y un buen QB puede alimentar a todos sus compañeros; contra quién se enfrenta en la temporada, ya que hay defensivas que literalmente secan a los receptores y otra que directamente son un colador; O si en su sistema ofensivo prevalece el juego terrestre o aéreo y ente caso cito el ejemplo de San Francisco, que puede tener partidos de solamente diez lanzamientos.
A su vez, al tener las franquicias de la NFL tantos receptores en su plantilla, es la posición donde se pueden obtener mayores steals dentro del juego, ya que hay muchos receptores que no están en el radar de nadie y ese jugador puede hacerte pelear el título. Por esa razón, uno también tiene que estar atento desde el minuto 1 en el fantasy con respecto a los WR, ya que en muchos de los casos ese robo proviene de la agencia libre y hay que ser lo suficientemente veloz para arrebatarlo antes que otro competidor lo haga.
En este 2020, hay una gran clase de receptores de novatos que podrían generar un alto impacto en cada equipo por lo que seguramente muchos sean elegidos en los Draft, pero antes de elegirlo, pregúntense quienes son sus compañeros (como dije antes si es WR1, WR2 o WR3) ya que por ahí necesitan uno que fuese el receptor principal o que no tenga tanta competencia.
A continuación, les presento mi Top 7 de receptores para la temporada que se viene, considerando una liga con puntaje standard como es nuestra Superliga Argentina de Fantasy con doce equipos por torneo.
De este grupo de receptores, no hay mucho que agregar. Son tremendos jugadores. No importa contra quién se enfrenten, si el su mariscal es bueno o malo: siempre van a rendir. WR1 en sus franquicias. Todos superarán las 1000 yardas y varias anotaciones en este año. En otras palabras, con estos muchachos tendremos muchos puntos garantizados durante todo el juego. Entre primera ronda, segunda ronda y tercera, si hay una corrida de RB que haga que todos participantes elijan corredores, serán seleccionados.
De este lote de receptores podemos tener siempre muchos puntos, pero también no son de manera continua con los WR anteriores y siempre podrían tener un par de partidos para el olvido. Salvo Mike Evans, los demás son la opción principal en sus equipos y a quienes más pases le debería tirar el QB. Steffon Diggs podría tener una gran temporada si tiene química con Allen. Diggs se especializa por correr rutas largas y Allen tienen un cañón en su brazo. Courtland Sutton puede tener el año de la explosión, pero depende de la labor de Lock, y todavía hay dudas sobre cómo le puede ir en este segundo año como titular. En Mike Evans, la gran duda es si Brady puede lanzarle pases de más 25 yardas. Yo creo que la cantidad de esos pases van a ser bajos, pero Tom Brady es lo suficientemente inteligente para poder meterlo en el sistema de juego a este gran receptor. Y el punto a favor de Evans es que seguramente lo marcarán los CB2 y ahí podría sacar muchísima ventaja.
Estos jugadores siguen estando dentro los WR1 de su equipo y son quienes van a recibir más pases en sus equipos, pero por H o por B, no son tan eficientes como los anteriores. Entre los problemas que podemos encontrar, es que son deportistas que tienden a lesionarse (Fuller, A.J Green, Brown) y eso provoca que se pierdan varios cotejos. Otro dependen muchísimo de la actuación de su QB (Kupp, Juju, Thielen, DJ Clark), mientras que otros directamente tienen mariscales o sistemas ofensivos nuevos y necesitarán un tiempo prudencial para acordar su estilo de juego al del ataque del equipo.
Este conjunto de once receptores (salvo Terry McLaurin) son todos WR2, que si bien no son la opción principal de su franquicia, en muchas ocasiones pueden serlo y darnos más puntos de lo que teníamos pensado. Debemos considerar que no siempre van a tener partidos destacados ni un promedio de ocho recepciones por encuentro (solo Robert Woods podría llegar a tenerlo por el sistema de juego de los Rams), por ende no hay que desesperarse si eso ocurre. Está claro que estos jugadores son nuestra segunda o tercera elección de WR en el draft (depende de si tenés la estrategia de buscar más receptores o corredores) y podríamos elegir a partir de la sexta o séptima ronda. En el caso de McLaurin es el receptor primordial de Washington, pero el mariscal de su franquicia no tiene nivel de NFL y eso le va a perjudicar su labor tanto en la NFL como en el Fantasy.
Llegamos a un séquito de receptores donde toda adquisición es un riesgo pero también puede generar grandes dividendos. Muchos de estos jugadores se encuentran en ofensivas donde no sabemos a ciencia cierta si pueden ser el WR1, WR2 o WR3. Si son el 1, podemos haber realizado una gran apuesta, pero si son la tercera o cuarta opción será un pick perdido. También aparecen los primeros receptores novatos. Si bien considero que Jerry Jeudy y CeeDee Lamb son los mejores prospectos, Henry Ruggs III a nivel fantasy tendrá mayor huella rápidamente. Los dos primeros tienen compañeros con gran calidad y nivel, en cambio Ruggs, de no mediar nada raro, se convertirá en el líder receptor de la franquicia de Las Vegas ya que no tiene competencia que pueda opacarle ese protagonismo. Ya hemos visto el año pasado que Tyrrell Williams no tiene el nivel suficiente para ser un WR principal, pero si para ser un gran acompañante.
A partir de las rondas doce, trece o más arriba, si están estos jugadores disponibles (los considero un error si fueron pickeados antes) es momento de ir ALL INN con estos muchachos. Michael Pittman, el novato de los Colts, puede ser un gran tapado y si agarra ritmo con Rivers podría ser un dúo letal, especialmente en zona roja, donde los puntos se pueden sextuplicar. Misma situación pienso con Justin Jefferson y Kirk Cousins. Con las lesiones de Jalen Hurd y Deebo Samuel, Brandon Aiyuk podría acaparar más recepciones de las pensadas y eso lo hace muy atractivo para apostar por él. Robby Anderson y Curtis Samuel se van a pelear toques en Carolina por ende hay días que uno jugará bien y otro mal. Esta es la zona de los steals de la temporada en cuanto a los receptores.
Si queremos jugar un pleno como en la ruleta, en estos jugadores podríamos poner alguna fichita. Ya estamos en las últimas rondas de los draft. Es el momento de lanzar una moneda al aire y ver qué pasa. Tenés todo para ganar y nada para perder. A lo sumo, si no funciona como creés, lo dejás y buscás otro que sorprendió en los primeros partidos e intentar agarrarlo en los waivers o Agencia Libre. Si no fueron elegidos en tu proceso de Draft, andá chequeando como están jugando en sus equipos, cuántos targets le lanzaron, porque justamente estas sorpresas son las que te pueden ganar el juego.
Co-Founder de No Huddle. Miembro activo del fútbol americano nacional desde 1996. Conductor del programa de Football Nacional y redactor de la web.