Habiéndose jugado ya la mayoría de los encuentros de la Semana 5 (quedan pendientes el choque de Monday Night entre Saints y Chargers y el Titans-Bills del martes), en No Huddle te traemos aquellos equipos que, para nosotros, fueron los grandes ganadores de esta jornada.
El equipo de Jon Gruden es el máximo ganador de la semana. Llegando de dos derrotas consecutivas, a los Raiders les tocaba ir al siempre complicado Arrowhead a jugar en el patio de Patrick Mahomes y no solamente se llevaron la victoria, sino que ésta llegó en el último cuarto, por medio de dos touchdowns del corredor Josh Jacobs, uno de los jóvenes motores que tiene la -ahora- franquicia del desierto. Derek Carr completó 22 de 31 pases para 347 yardas y terminó con dos envíos de anotación y una intercepción. Ah, y los Chiefs no perdían desde el mes de noviembre. Las Vegas se va al bye con una sonrisa.
Cleveland recibía en su casa a unos siempre molestos Colts, que en semanas anteriores venían asustando a toda la NFL con una unidad defensiva prendida fuego. Sin embargo, el triunfo quedó para los Browns, que ganaron los últimos cuatro partidos y se pusieron con récord de 4-1 por primera vez desde 1994. ¿Saben quién era su entrenador en ese entonces? Bill Belichick.
Esta vez, la fórmula de los de Baker Mayfield fue sencilla: la mejor parte de su ofensiva se vio en la primera mitad y luego supieron colapsarle el pocket a Philip Rivers, quien sabemos que al verse presionado no toma las mejores decisiones. Por esta vía llegaría un pick six de Ronnie Harrison, quien devolvió el balón para un TD de 47 yardas, y más tarde, ya en el último cuarto, el constante asedio al mariscal de Indianápolis terminaría también generando un safety.
¿Hacer 30 puntos en la primera mitad y en casa del último campeón de la NFC? Sí. ¿350 yardas por aire y tres touchdowns para Ryan Fitzmagi... ehh, perdón, Fitzpatrick? Sí, también. Estos Dolphins son una montaña rusa de emociones. Aunque desde hace tiempo, más precisamente desde la llegada de Brian Flores, de a poco se ha ido notando un cambio en la cultura de Miami. El equipo del sur de la Florida puede un fin de semana perder de la manera más insólita con un combinado de casados vs. solteros y, al siguiente, plantarse en la otra punta del país ante, en teoría, uno de los más fuertes de la Nacional.
Es cierto, San Francisco está muy disminuido por lesiones y Jimmy Garoppolo, quien regresaba de estar fuera un par de juegos, fue reemplazado por C.J. Beathard para comenzar el tercer cuarto, pero a los Dolphins la alegría de haber ganado 43 a 17 no se las quita nadie.
Nota realizada por la redacción de No Huddle.