¡Llegamos a mitad de temporada! Costó pero se llegó al fin. Los casos de COVID-19 están cada vez más presentes en la liga y ponen en jaque el desarrollo de algunos partidos de cara a la próxima semana. Asímismo, pasó la fecha de tradeline y los equipos estuvieron bastante conservadores. A continuación, el tan esperado ranking.
Friendly reminder: No odiamos a tu equipo. Solo queremos hacerte enojar.
Enorme victoria para quienes continúan con el único invicto de la temporada. Los Steelers iniciaron el duelo divisional devolviendo para touchdown una intercepción a Lamar Jackson. La fórmula ganadora de Pittsburgh pasa por su defensiva que se hace enorme cuando más se la necesita y siempre termina dándole una chance más a su ofensiva. Hablando de la misma, demoró en entrar en partido y es entendible cuando enfrente se encuentra una de las mejores defensivas de la liga. No obstante, por momentos pareció encontrar cierto ritmo y terminó anotando tres TD. La parada no era nada fácil pero los Steelers cumplieron y se alzan con el liderato de la división. A la vista están los Cowboys sin embargo, antes deberán lidiar, nuevamente, con un exhaustivo protocolo de COVID-19 debido al positivo de Humphrey.
Otra paliza aplastante para Kansas City que, pese a tener otra abultada victoria, cae a nuestro segundo puesto en el ranking solamente por la hazaña de los Steelers de ganar tres partidos en fila contra pesos pesados de la AFC. El partido fue, si se quiere, diametralmente opuesto al de la semana 7 frente a Denver: en aquella ocasión, todo el equipo contribuyó a la victoria. En esta oportunidad, fue todo de Patrick Mahomes, quien bombardeó sin piedad a los Jets, consiguiendo 416 yardas y cinco touchdowns. La defensa no se habrá llevado pelotas o sumado puntos, pero hizo su trabajo al limitar a los Jets a apenas 221 yardas y nueve puntos. La próxima semana, el equipo de Andy Reid se enfrentará como visitante a los Panthers, antes de tener su descanso en la semana 10.
Cuando algunos comenzaban a dudar del liderazgo tras la derrota frente a los Cardinals, los de Seattle lograron un triunfo contundente frente a los Niners para seguir haciendo valer el poderío de local. Russel Wilson sigue jugando en nivel superlativo, y a diferencia de una semana, no tiró intercepciones costosas, pero sí 4 pases de anotación. Esta vez fue Metcalf el que se llevó los reflectores, y Lockett tuvo un rol más secundario en una gran actuación colectiva. Del lado defensivo lograron contener a un equipo muy golpeado por lesiones, pero por ello no es menos meritorio. Impidieron el ataque por tierra, y en buena medida por aire también, aunque los 20 puntos del último cuarto serán un punto para ajustar. Los Seahawks siguen encaminados no sólo a quedarse con la división, pero ya también pueden empezar a soñar con el seed #1 de la nacional.
Durísima derrota para Baltimore. Los de Harbaugh no solo perdieron un partido divisional, sino que además dejaron muchas dudas, sobre todo a la ofensiva. Lamar Jackson está muy lejos del nivel de la última temporada que le valió la elección como MVP y además, la conexión con sus receptores es escasa. Para colmo, enfrente tenía una defensiva de las mejores en la NFL. Esto significó que terminara el partido con dos INT y dos fumbles y completando menos del 50% de sus envíos. Hace varias semanas que señalamos estos inconvenientes que tenía Lamar y el haber enfrentado defensivas de menor calibre maquillaban su pobre producción. Los Ravens deberán mejorar drásticamente si quieren competir en playoffs.
Desde este espacio se venía reclamando que Buffalo pudiera reestablecer el ataque por tierra para abrir más y mejores opciones a Josh Allen, un QB que puede tener dificultades para ponerse el partido al hombro y ganar desde el pocket. Esta vez Singletary y Moss hicieron un combo 1-2 de corredores con más de 80 yardas cada uno y 2 anotaciones, más la tercera que llegaría por una jugada diseñada de corrida para el propio mariscal. El ataque aéreo no fue el punto fuerte, pero considerando que la otra faceta del juego estaba funcionando, sólo realizaron 18 intentos por aire, que terminaron por ser 11 pases completos y 154 yardas. Los Bills consiguieron una nueva victoria dentro de la división, y parecen cada semana un paso más cerca de coronarse campeones, aunque no deberán relajarse porque Miami no da el brazo a torcer.
Los Bucs se llevaron un partido sorpresivamente complicado como visitantes, y estuvieron a nada de que los Giants lo empataran en el final. A Tom Brady le costó mover la pelota en la primera mitad, antes de encontrar el ritmo necesario para marcar 19 puntos en la segunda mitad. Sin embargo, el juego terrestre se vio en gran medida frenado por el front seven del anfitrión. La defensa, que fue superada al principio por Daniel Jones y la ofensiva de Jason Garrett, mantuvo al equipo a flote, consiguiendo dos turnovers de Jones que se tradujeron en puntos… y todo eso antes de casi permitirle el empate al mariscal de los Giants en una serie casi magistral. Tampa Bay está ahora 6-2 en la división, pero no pueden estar muy tranquilos: ahora vienen los Saints (5-2), quienes ya vencieron a los de Bruce Arians en el partido inaugural de la temporada y tienen, por el momento, el desempate sobre ellos.
¡Qué derrota más costosa! Después de tener un partido en el que parecían haber recuperado su nivel, los Packers lucieron bastante mal en su encuentro frente a su rival divisional. La defensiva prácticamente no se presentó a jugar y Dalvin Cook acarreó el balón a gusto y placer. La ofensiva no encontró ritmo ante la ausencia por segunda semana consecutiva de Aaron Jones y A-Rod tuvo problemas para encontrar en espacio a sus receptores, a excepción de Davante Adams y una larga recepción de Tonyan. Dicho esto, se esperaba que Green Bay estuviera agresivo de cara al trade deadline e incluso se los vinculó a un supuesto intercambio con los Texans por el WR Will Fuller pero no hubo acuerdo. Como agravante, en una semana corta, se conoció que el novato AJ Dillon arrojó positivo de Coronavirus en la ronda de tests que se realizaron el domingo previo al partido, lo que significa que todo contacto estrecho con el RB será puesto en la lista de COVID-19 y obliga a la franquicia a funcionar de manera remota al menos por algunos días. Entre ellos se encuentra Jamaal Williams quien se hizo cargo del backfield ante la ausencia de Jones. Noticias que nadie quiere recibir, mucho menos en una semana tan corta. Para fortuna de los Packers, en frente estarán los 49ers que actualmente ¡son una enfermería!
Al igual que los Bucs, los Saints se llevaron un partido realmente complicado. Sin embargo, Chicago, pese a su ofensiva irregular, es un rival mucho más calificado que los Giants. En la primera mitad, la ofensiva de Pete Carmichael estuvo bastante desaparecida hasta que Drew Brees logró anotar en la última serie de la primera mitad. En la segunda mitad, la historia se revirtió: la ofensiva fue un poco más productiva, pero la defensa, que hasta el momento había hecho un muy buen trabajo, le permitió meter 10 puntos sin respuesta a Nick Foles, y así llevar el partido a tiempo extra. En overtime, los equipos intercambiaron un par de posesiones hasta que los Saints finalmente consiguieron avanzar lo suficiente para que Wil Lutz convirtiera el gol de la victoria. Nueva Orleans ahora se prepara para recibir a Tampa Bay en un duelo crucial: si le ganan al equipo de Bruce Arians, pasarán a ser los nuevos líderes de la NFC Sur.
En nuestro último power ranking decíamos que Titans habían entrado dormidos al inicio del juego, y eso le costaría el partido y el invicto frente a Pittsburgh. La lección aparentemente no fue aprendida, ya que en los primeros tres cuartos solo anotaron 7 puntos, frente a los 17 de los Bengals, y en el último cuarto cuando asomaba alguna esperanza de recuperación, no encontraron las herramientas para detener a un Burrow inspirado, que se supo asociar bien con Boyd y Higgins. En ataque pudimos ver el sello registrado, Henry con más de 100 yardas y Tannehill con pocos envíos, pero con buena efectividad, aunque en esta ocasión lanzó una intercepción dentro de la zona de anotación que bien podría haber sido uno de los condicionantes en el desarrollo posterior. Es momento de empezar a hablar de Gostkowski y sus méritos para ser el pateador titular de una franquicia que aspira a llegar lejos en play-off.
Semana libre para los Cards y un descanso que quizás hubiesen preferido evitar los de Arizona luego del envión anímico que significó ganarle a los Seahawks y en las condiciones que se dio el triunfo. Sin embargo, con la lesión que sufrió Kenyan Drake le dió un poco de margen a Kingsbury para reacomodar su playbook y preparar a Chase Edmons que por cierto estaba teniendo un nivel un tanto superior a su compañero. Kyler Murray deberá mantener el buen reparto del balón entre Hopkins y Kirk, que tendrán que tener un papel preponderante en la dura parada, esta semana, frente a la gran secundaria de Miami.
Debe haber pocos registros de un equipo que se pueda sobreponer a 4 turnovers en tan sólo una mitad, por lo que las dos intercepciones de Goff, sumado a las dos capturas con fumble fueron las jugadas que inclinaron la balanza a favor de los Dolphins. La ofensiva de Rams funcionó por tierra, pero jamás lograron dar buena protección al mariscal dentro de la bolsa, lo que forzó los intercambios de posesión. En equipos especiales el pateador se volvió a lucir, aunque en una de las pocas jugadas sin recepción libre, el punt returner llevó el balón más de 80 yardas hasta la zona de anotación. En defensa lograron limitar a Tua en su debut, aunque de poco sirvió dadas las fallas en ofensiva. Sean McVay no está contento, y tiene que encontrar respuestas al cover 0 de Miami, o lo empezará a ver cada vez más seguido en lo que queda de la temporada.
Hasta que un día Phillip Rivers tuvo un buen partido y los Colts se parecieron más a lo que todos esperábamos en la previa, un equipo con aspiraciones de play-off. El veterano mariscal pudo entrar en ritmo, lanzar tres pases de anotación y sin cometer errores groseros ni ceder jugadas negativas. En defensa lograron ahogar constantemente a Stafford, con cinco capturas y una intercepción que terminaron devolviendo hasta la end zone rival, y a ello le sumaron que lograron detener a D’Andre Swift por tierra. Los Colts ya están 5-2, habiendo empatado a los Titans en el récord, algo que parecía impensado hace algunas semanas, y que les permite esperanzarse con cumplir las expectativas que se formulaban en la previa.
El partido tuvo varios condimentos pero muy poco para destacar, más que nada del lado ofensivo. Los Browns tienen semanas, como la pasada, en las que demuestran todo su poderío en ambos lados del balón pero es la falta de consistencia lo que atormenta a este equipo. Las condiciones no eran las mejores, eso es cierto, perdieron a OBJ para el resto de la temporada y Chubb aún no regresó, sin embargo, anotar seis puntos ante una defensiva que venía de permitir más de 40 la semana anterior, no es propio de una franquicia que aspira a llegar a playoffs. La semana de descanso será bienvenida en Cleveland sobre todo para recuperar al antes mencionado RB y para que Landry y Garrett se pongan a punto nuevamente antes de enfrentar a los Texans. El war-daddy no se hizo visible en el stat sheet debido a una dolencia en la rodilla que parece no ser de gravedad.
¿Tua?, ¿qué Tua?, en el debut del mariscal novato la defensa y los equipos especiales se encargaron de asegurar la primera victoria. Una primera mitad de manual para la defensa de Miami, que logró dos intercepciones y dos fumbles, uno de ellos que lo devolvieron hasta la zona de anotación, y el segundo hasta la yarda uno del rival, que una jugada más tarde terminó en touchdown. Si quisiéramos ser puntillosos, Xavien Howard soltó una intercepción, y Eric Rowe perdió un claro pick six. Los equipos especiales anotaron en una devolución de un despeje, el pateador sigue perfecto, y el punter gana batallas posicionales, todo lo que se puede pedir. En ataque estaba el esperado debut, pero ante un desarrollo tan favorable, prefirieron no arriesgar las jugadas, y consumir el reloj dejando que el mariscal rival cometa los errores.
¿Quién dijo que las victorias feas no sirven? Los Raiders visitaron Cleveland, en un partido en lo que más se destacó fue el cambiante clima de Ohio y se llevaron la victoria y consigo cierta tranquilidad. Los de Gruden estuvieron muy lejos de su mejor producción pero aún así les alcanzó para llevarse un durísimo partido frente a los Browns. Derek Carr apenas rebasó las 100 yardas por aire pero Josh Jacobs volvió a aparecer y marcó el tempo de la ofensiva. La defensiva, por su parte, jugó un partido correcto pero también es cierto que Mayfield y los suyos no tuvieron el mejor día en la oficina. La gran figura fue el K Daniel Carlson aún habiendo errado un FG producto del mal clima que aconteció durante el partido. Mucho por corregir pero estos partidos, por fea que fuera la derrota, brindan cierta confianza de cara al futuro.
Segunda derrota en fila para Chicago que empieza a parecer como el equipo que todos creíamos antes de la temporada. Lo decíamos en la última edición, los Bears se las ingenian para probarnos que estamos equivocados sobre ellos pero lo cierto es que hay una evidente falta de talento en la ofensiva. La línea es bastante endeble y hace semanas que no permite que Montgomery rebase las 100 yardas por tierra. Nick Foles tiene destellos de esperanza pero carece de talento para ser titular en esta liga. De hecho, de no ser por lo mal que jugó Trubisky, su competidor, aún sería suplente. Allen Robinson es un gran jugador pero quienes tienen que aprovechar la atención que éste demanda, cometen errores mentales como el de Javon Wims. La defensiva sigue siendo lo único a destacar de este equipo pero necesita que su contraparte haga lo suyo para facilitarles un poco el trabajo. De otra manera, los Bears perderán más de lo que ganarán.
Es difícil hacer una evaluación del roster y el juego de los Niners cuando se encuentran tan condicionados por las lesiones, y lamentablemente el lunes nos enteramos que la temporada de Jimmy G y George Kittle están en riesgo, dejando en el novato Ayiuk a quizás el mejor jugador en ataque. La victoria de visita en New England esperanzaba al equipo de la bahía, pero el partido contra Seattle fue un nuevo baldazo de agua fría. Siendo francos, Mullens entró bien al partido, y los 27 puntos en ataque no son decepcionantes, pero al competir en una división tan compleja y competitiva parece difícil que los 49ers puedan recuperarse a tiempo y permanecer en la pelea, una lástima para el último finalista de Super Bowl. Lo último que se pierde son las esperanzas, sobre todo teniendo a un gran entrenador en el sideline.
Los Eagles ganaron otro partido clave, esta vez contra Dallas, aunque algunos quizás puedan verlo desde otra óptica: los Cowboys simplemente no compitieron. El equipo de Mike McCarthy se fue arriba en el marcador al descanso, una ventaja que no volverían a tener por el resto del partido. La defensa obviamente es responsable de haber limitado aún más a un Ben DiNucci que sencillamente no tiene lo que se necesita como para mover una ofensiva que, pese a todo, aún tiene capacidad de hacer mucho daño. Y en ataque, Carson Wentz fue horrendo (dos intercepciones y dos fumbles perdidos), pero también tuvo los dos touchdowns (para Travis Fulgham y Jalen Reagor) que terminaron constituyendo la ventaja de Philadelphia en el partido. Así las cosas, Eagles se va a su semana de descanso con la punta asegurada (tiene una ventaja de un partido y medio sobre Washington, su segundo), y pensando en el segundo duelo frente a los Giants (a quienes ya derrotaron) en la fecha 10.
Dura derrota para los Panthers, que ven cómo sus chances de pelear por playoffs se vuelven más tenues. La defensa hizo lo posible para mantener a flote al equipo durante todo el partido. Sin embargo, lo que más sorprendió es lo poco que utilizaron a DJ Moore, que prácticamente no apareció hasta la última serie del partido. También es cuestionable que los Panthers hayan ido dos veces en cuarta y 1, cuando la situación del juego no lo exigía para nada, y que en ambas ocasiones hayan fracasado. No fue el mejor partido para Joe Brady, cuyo playcalling dejó un poco que desear. El equipo sí fue afortunado en que Teddy Bridgewater, de partido malo y deslucido, no sufriera una lesión grave en aquella jugada totalmente sucia y desleal que protagonizaron Dante Fowler Jr. y Charles Harris (quien fue expulsado del partido). Los Panthers tendrán ahora un partido complicadísimo por delante: se medirán frente a los Chiefs en el Arrowhead Stadium.
Grandísima victoria del equipo de Vic Fangio que supo levantarse rápido de la paliza que le propinaron los Chiefs la semana pasada. Los Broncos superaron un déficit de 23 puntos y se quedaron con el partido en la última jugada con un TD del novato KJ Hamler. La ofensiva entró tarde al partido pero fue suficiente. Lo que Pat Shurmur y Fangio deberán considerar es que alcanzó frente a Chargers, que acostumbra a perder los partidos de esta manera, pero deberán hacer un papel mucho mejor ante otros rivales. Así mismo, como lo dijimos en la última edición, deben encontrar la manera de equilibrar aún más el plan ofensivo. Drew Lock no puede seguir tirando 40 pases por partido. Del lado defensivo, Bradley Chubb continúa imparable y la secundaria incluso se hizo con dos INT. La próxima semana, visitan un rival que acostumbra a perder sobre el final como los Chargers pero que están jugando mucho mejor. Será una gran prueba para estos Broncos que les permitirá conocer para qué están en la temporada.
Pedazo de victoria para Minnesota. Los de Zimmer venían de producciones muy pobres y se alzaron con autoridad en Green Bay. ¿La fórmula? El juego por tierra, como lo fue siempre. La ofensiva se apegó a la fórmula que tanto éxito le generó en el pasado y se llevaron el partido con prestancia. Dalvin Cook fue la gran estrella de la tarde con 163 yardas, tres TD por tierra, y otras 63 yardas y un TD por aire. Cook se adueñó por completo de la defensiva de Packers y les dió un golpe justo en el rostro. Cousins no necesitó más que 11 pases completos para mover las cadenas. Si bien la producción del RB fue suprema, la defensiva que tantos titulares perdió en la última semana e incluso durante el partido, jugó un buen partido ante Aaron Rodgers y generó un último stop para que los Vikings se llevaran el partido. Mucho por mejorar pero también mucho por destacar y sostener de lo realizado esta última semana.
Puede ser que los Chargers básicamente hayan aniquilado su última oportunidad de competir por los playoffs. Y nótese que la elección del término “aniquilado” no es nada azarosa. Porque una cosa es que a un equipo lo superen en el último cuarto, pero los Chargers iban arriba por 21 a la mitad del tercer cuarto… y aún con 2:30 por jugar, todavía por apenas seis. Denver los pasó por encima en el último cuarto, con 21 puntos convertidos, y el touchdown de la victoria ocurrió en la última jugada del partido. Aún cuando Justin Herbert (29/43, 273 yardas, tres touchdowns y dos intercepciones) no tuvo su mejor partido, la defensa definitivamente debería haber mantenido la ventaja. Es la primera vez en la historia que un equipo desperdicia ventajas de al menos 17 puntos en tres partidos consecutivos. Francamente, si el dueño de los Chargers estuviera interesado en cambiar la suerte de su equipo, debería considerar despedir a Anthony Lynn de inmediato.
Los Patriots están oficialmente en un pozo profundo. El equipo sencillamente no encuentra la forma de ganar aquellos partidos que, en años anteriores, podía finiquitar sobre el final. Estaba Tom Brady antes, cierto, pero lo cierto es que un buen equipo se sobrepone a las limitaciones. Después de una primera mitad bastante peleada, los Patriots subieron la intensidad en el complemento. Pese a los problemas defensivos contra el juego terrestre de Buffalo, la unidad aún así encontró la manera de frenar a Josh Allen, lo suficiente como para que la ofensiva, que tuvo un buen partido, pudiera mantener al equipo en la contienda. Los Patriots estaban en posición de, cuando menos, empatar el partido y llevarlo a tiempo extra, hasta el fumble de Cam Newton en la zona roja de los Bills que selló la suerte de New England. Ahora enfrentarán a los Jets, pero lo que se viene después no es nada lindo para los de Bill Belichick.
Los Lions no logran hacer pie de local en lo que va de la temporada. Luego del bye los de Detroit habían conseguido dos victorias de forma consecutiva fuera de casa, pero esa racha se acabó. En ataque no pudieron correr de forma efectiva el balón con un D’Andre Swift desaparecido, no supieron proteger a Stafford dentro de la bolsa y cedieron 5 capturas, y el QB lanzó un pick six que inclinó la balanza a favor del visitante. En defensa la secundaria siguió sufriendo y no supo encontrar respuestas a un Philip Rivers inspirado, y cuando la línea supo conseguir algunas detenciones clave, cometieron errores mentales que condujeron a infracciones. Récord de 3-4 que les impide acercarse a los líderes divisionales, considerando que Packers y Chicago habían perdido esta semana.
¡Bienvenidos los Bengals a la NFL! Luego de semanas de aclimatación y algunas dudas, Cincinnati se llevó un partido durísimo frente a los Titans que hace unas semanas eran uno de los rivales “a vencer”. Burrow continúa demostrando que es el mejor QB de su clase y que tiene el talento suficiente para jugar en esta liga pero, sobre todo, para ganar en la NFL. Las apariciones de Tyler Boyd y Tee Higgins son sumamente positivas y el veterano Gio Bernard no lució para nada mal ante la ausencia de Joe Mixon. A diferencia de la ofensiva, del lado defensivo del balón los nombres no son tan rutilantes y a pesar de esto, la unidad funciona bastante bien bajo el lema “bend but not break”. Por delante tienen una semana de descanso que se encara de otra manera teniendo una victoria bajo el brazo pero no pueden relajarse demasiado ya que los Steelers visitarán Cincinnati la siguiente semana.
Las victorias morales no cuentan en ningún deporte, al menos en rigor de la competencia. Los Cowboys se retiraron del Lincoln Financial Field con otra derrota para sumar seis en la temporada y si bien la sensación después de perder nunca es buena, Dallas tiene mucho que rescatar de este partido pero por sobre todo, el hecho de que los jugadores no “renunciaron” a su head coach. Dada la producción que venía teniendo este equipo, uno suponía que los jugadores sencillamente habían dejado de pelear, que habían “bajado los brazos”. Sin embargo, el SNF nos demostró que aún están dispuestos a dar batalla y a pesar de que hay demasiadas lesiones y falta de talento, van a seguir luchando. La temporada está cada vez más cerca de definirse y quedar fuera de toda pelea que no sea un pick alto, y de cara al futuro, esta actitud permitirá sentar las bases de las expectativas de la próxima temporada. Hablando de lesiones y ausencias, Andy Dalton se perderá otra semana debido a un contacto estrecho con un COVID-19 positivo y McCarthy planea poner en cancha un nuevo QB, que sería el cuarto en lo que va del año y en un lapso de cinco semanas. Pelea abierta por el puesto entre Cooper Rush, Garrett Gilbert y Ben DiNucci.
Gran victoria de Atlanta como visitante y frente a unos Panthers que prometían ser duros. Si vemos solo los números de Matt Ryan por aire (21/30, 281 yardas y una intercepción), diremos que no tuvo un buen partido. Lo cierto es que Ryan generalmente pudo mover la pelota; lo que sí le faltó fue mayor precisión en la zona roja. De todos modos, Younghoe Koo pudo salvarle las papas, consiguiendo cuatro goles de campo importantes. La nota, sin embargo, la dio la defensa. Tremenda actuación para una unidad que ha tenido partidos horribles en esta temporada: en esta oportunidad, molestaron constantemente a Teddy Bridgewater, consiguieron tres capturas y lo limitaron a apenas un touchdown (y una intercepción), a la vez que evitaron que Mike Davis, Robby Anderson y DJ Moore fueran factores decisivos. El equipo está 2-1 desde que Raheem Morris asumió como HC interino, y tienen la chance de generar una buena racha antes de la semana de descanso, cuando reciban en esta fecha a los Broncos, que vienen de una resonante victoria contra los Chargers.
Los Texans salen del bye con un récord de 1-6 y la ambición de lograr revertir la mala imagen inicial. La semana de descanso debería haber dado tiempo suficiente a su nuevo entrenador para instalar el plan de juego y planificar el partido. La oportunidad para retomar la senda positiva se presenta ante los Jaguars de visitante, único equipo que lograron vencer en lo que va de la temporada, y que no contará con su mariscal titular, una situación inmejorable para convertir su record a 2-6 en una temporada que ya parece perdida.
Semana de descanso para el equipo de Ron Rivera, que venía de llevarse una importante victoria contra Dallas. Lo bueno para ellos es que ni los Cowboys ni los Giants aprovecharon la oportunidad para acortar distancias con Washington, que actualmente está segundo en la NFC Este. Y ahora, el “equipo sin nombre” tendrá la oportunidad de consolidarse en dicha posición, cuando se enfrente por segunda vez a Nueva York, en donde seguramente buscarán vengarse de aquella derrota peleadísima propinada por el equipo de Joe Judge.
Los Giants se están volviendo lentamente los Chargers. Porque, más allá de la marca de 1-7 que actualmente ostentan, un par de jugadas aquí y allá podrían haber cambiado la historia. Más allá de esta digresión contrafáctica, los Giants todavía no encuentran la forma de ganar los partidos cerrados (tuvieron seis de ellos en la temporada, y apenas ganaron uno). Lo positivo, si se quiere, es que le pelearon de igual a igual a los Buccaneers durante todo el partido. Buena parte del crédito se lo lleva la defensa, que, pese a algunas faltas (que incluso generaron controversias), no permitió que Tom Brady se encendiera a full. La línea ofensiva, por su parte, resistió bastante bien al talentosísimo front seven de los Bucs. Pero el problema (como no podía ser de otra forma) fue y sigue siendo Daniel Jones, quien tuvo dos intercepciones muy caras. Esta narrativa podría haber sido opacada por esa última serie ofensiva, que casi empata el partido. Pero lo cierto es que si Jones hubiera cuidado más la pelota, probablemente eso no hubiera sido necesario. El mariscal de los Giants está actualmente en un limbo del cual parece no ser capaz de salir.
Los Jags salen del bye y enfrentan a los Texans, que también llegan luego de semana de descanso y con un récord de 1-6. El primer duelo se disputó en Texas donde ganó el local, y ahora será el turno de jugarlo en la Florida, aunque ya se anunció que el QB titular, Gardner Minshew, no podrá ser de la partida debido a una lesión. El desafío será neutralizar a Deshaun Watson, o de mínima intentar detenerlo en algunos drives para que su propia ofensiva pueda sumar puntos y dejarlo en el banco.
Parece difícil encontrar cosas nuevas para decir sobre esta franquicia semana tras semana, cuando ninguna de las fases del juego parece funcionar a pesar de los cambios que están intentando. Es cierto que el rival eran los Chiefs y las probabilidades no estaban del lado de los Jets, pero una vez más no pudieron mover el balón ni por aire ni por tierra, y Sam Darnold no logra su mejor versión en el esquema ofensivo de Adam Gase. En defensa no hubo respuesta a la velocidad de los Chiefs y el talento de Mahomes y Kelce. En las últimas horas la franquicia intercambió al apoyador Avery Williamson, lo cual confirma las hipótesis de reconstrucción a partir de la próxima temporada.
Co-Founder de No Huddle. Editor, redactor y conductor de los distintos productos del medio. Sigue la NFL desde 2012 y la cubre desde 2020. Especialista en Dallas Cowboys.
Desde hace algunos años me podés encontrar en NFL Argentina en Twitter comentando partidos, y ahora me sumo a No Huddle para aportar mi granito de arena y ayudar a convertirlo en el medio líder en el deporte. Me volví aficionado al fútbol americano por casualidad, cuando me topé con el Super Bowl XLVI mientras hacía zapping una noche de verano. Tras aquel partido, comencé a seguir a los Patriots, a quienes les tuve simpatía porque perdieron en esa oportunidad. Pensé que era una buena opción, hasta que poco después me enteré que eran los más ganadores del momento... terminó siendo una gran decisión.
Economista de carrera, escritor por pasión. A los diez años mi viejo me regaló la 13 de Dan Marino y desde entonces el aqua y naranja corre por mis venas. Después de algunas temporadas de amor/odio, el deporte se convirtió en casi una obsesión. Me encanta analizar los Xs & Os y puedo invertir fácil 20 minutos de mi día mirando una sola jugada.
Cruzo el charco digitalmente hablando. Español, de Cádiz. Informático y diseñador gráfico autodidacta. De los Bears, no sé aún por qué. Ilusionando y agradecido de pertenecer a la familia de No Huddle.