El año del COVID va llegando a su fin y si algo hemos aprendido a lo largo del mismo, es que de un momento a otro, todo puede cambiar. La NFL no ha quedado exenta de esto y tuvo que adaptarse dramáticamente a esta “nueva realidad” que nos impone la pandemia, sino que les pregunten a Ravens y Steelers, que por un brote de casos positivos en Baltimore (que ya llegaría a 15 afectados) vieron pospuesto su encuentro en tres ocasiones diferentes.
El partido en cuestión es el que debía disputarse en el Heinz Field, el jueves de Thanksgiving en prime time. Inicialmente, debido al brote en Ravens en el que se destacan los nombres de Lamar Jackson y Calais Campbell, se había movido al día domingo, luego al martes y ayer se conoció que finalmente se jugará mañana, miércoles, desde las 17.40 de Argentina. Y como todo el cronograma de la NFL es un dominó, este cambio impacta también en posteriores choques, ya que Baltimore debía enfrentar a los Cowboys el día jueves y se reprogramó para el próximo martes. Lo mismo sucede con el Pittsburgh-Washington, aplazado del domingo al lunes.
The Week 12 @Ravens-@steelers game has been moved to Wednesday at 3:40pm ET on NBC. Here's a look at the changes and the full schedule: https://t.co/UUfSeq2uvh pic.twitter.com/59eCLmLlX6
— NFL Football Operations (@NFLFootballOps) December 1, 2020
Si bien hasta el momento es para destacar cómo se han manejado la mayoría de las franquicias y la liga misma, las últimas semanas han sido un tanto tormentosas respecto de los protocolos. En la teoría, y según indicaron distintas fuentes, el brote de los Ravens se produjo luego de que un miembro del staff no cumpliera con las pautas establecidas y ocultó síntomas compatibles con la enfermedad. Esto provocó que varios jugadores se contagiaran y la NFL dispuso que aquellos “contactos estrechos” también deban aislarse. Más allá de que no todos son positivos de coronavirus, esta cercanía con sus compañeros los obliga a cumplir una cuarentena estricta para evitar un brote sin control y pone a Harbaugh contra la pared, obligándolo a jugar con suplentes.
Volviendo la mirada hacia el panorama más general, y a sabiendas del particular año que tendría por delante, la liga implementó distintas medidas en virtud de permitirles a los equipos sobrellevar la situación con el menor impacto posible. Entre ellas se destacan la ampliación de la lista de lesionados (IR) y del equipo de prácticas, ambas con el afán de permitir un mayor y mejor manejo del roster y disponibilidad inmediata para subsanar ausencias.
Note: The NFL competition committee added roster flexibility -- 16-man practice squads, unlimited IR-return, etc. -- for issues like the #Ravens’ COVID-19 outbreak. The stance has been any schedule changes are medical decisions, not competitive decisions. Who's out is irrelevant. https://t.co/Zpjnd1QLh4
— Tom Pelissero (@TomPelissero) November 27, 2020
Co-Founder de No Huddle. Editor, redactor y conductor de los distintos productos del medio. Sigue la NFL desde 2012 y la cubre desde 2020. Especialista en Dallas Cowboys.