Y volvió la NFL, señoras y señores.
Tuvieron que pasar 221 días desde aquel Super Bowl LIV, cuando en la ciudad de Miami terminarían coronándose los Kansas City Chiefs para darle a Andy Reid su primer título después de tantos años de carrera, y también su primero (se supone que de varios más por venir) a Patrick Mahomes. Pero ya pasó. Ya está. Respirá. Tras una offseason que se hizo eterna por la pandemia del COVID-19, anoche los mencionados Chiefs, campeones vigentes, vencieron 34-20 a unos Houston Texans que hacia el final terminaron inflando el marcador con dos touchdowns que no les alcanzaron para un intento de remontada que nunca llegó a ser tal.
En la previa habían rumores de que los equipos podían llegar a realizar alguna acción durante el himno, en nombre de los justos reclamos por igualdad racial que encarnan en estos momentos en Estados Unidos, y dichas acciones no faltaron: en señal de protesta, el plantel completo de Houston se quedó en el vestuario mientras se entonaban las estrofas de la canción patria y recién salieron al campo cuando ésta había terminado. Por su lado, los jugadores de Kansas permanecieron juntos a un costado de la cancha, la mayoría con sus brazos entrelazados entre sí, con unos pocos que hincaron su rodilla en el suelo. La que no durmió con esto fue la misma NFL, que convocó a las hermanas Chloe y Halle Bailey para dicho momento. Una llevaba una remera con la frase "Rest in Power, George Floyd", y la otra una que decía "Say her Name, Breonna Taylor", tomando así dos de los casos que más notoriedad pública y mediática tuvieron en los últimos meses.
Lo más sorprendente, que de todas maneras deja de serlo cuando revisás los resultados de las últimas elecciones en el estado de Missouri, en las que el republicanismo de Trump se impuso con el 56% de los votos, fueron los abucheos que se escucharon en el estadio cuando los jugadores de ambos equipos posaron unidos, mezclados, para tomarse una foto en contra del racismo.
Pero enfocándonos en las notas de color, no faltaron los momentos llamativos. Quizás el más notorio de la noche ocurrió cuando Deshaun Watson (quien, pobre, sigue corriendo por su vida después de cada snap) terminó en la sideline de los Chiefs y, ya que estaba cerquita de su amigo Pat Mahomes, se sentó a su lado por unos segundos y le preguntó, por qué no, cuántas propiedades en Hawaii se había comprado ya con la extensión de más de 500 millones que firmó en julio.
"¿Todo bien, Pat?" pic.twitter.com/wkoAV9ybZN
— No Huddle (@nflnohuddle) September 11, 2020
Otra perlita llegaría de la mano de Andy Reid, quien queriendo cuidarse de esta pandemia salió al campo con una máscara protectora transparente. Hasta ahí todo bien, claro, pero cuando la condensación del aire empezó a hacerse notar, el entrenador terminó detrás de un plástico empañado que, obviamente, generó una buena cantidad de memes en la noche inaugural de la NFL. Y sí, de algo nos íbamos a tener que reír.
Andy Reid’s eyeballs trying to see through his mask pic.twitter.com/5RShBoXVaA
— Barstool Sports (@barstoolsports) September 11, 2020
Wonder if Andy Reid is gonna draw up a play on his mask pic.twitter.com/tM7I9chVGv
— John (@JohnHillbery) September 11, 2020
En concreto, regresó la NFL. Mahomes sigue siendo Mahomes (211 yardas y 3 TD); el rookie de LSU, Clyde Edwards-Helaire, tuvo un muy buen debut (138 yardas por tierra, 5.5 de promedio y un TD); David Johnson, otra vez, quiere volver a ser todo lo bueno que alguna vez fue y los Texans seguirán luchando contra sus propios fantasmas.
Subite al barco de esta liga en modo pandemia 2020, dale, todavía hay lugar.
Tengo un papel que dice que soy periodista. Fui prensa, trabajé en diario Olé y me sumé a No Huddle como editor. De los Colts de Peyton.