Nueva temporada, nuevos objetivos. Los rosters son, en su gran mayoría, diferentes a lo que fueron a finales de la temporada pasada y con ellos ingresa una nueva camada de rookies.
La agencia libre y el draft quedaron atrás para dar comienzo a los trabajos de pretemporada y, desde No Huddle, haremos un repaso del Power Ranking de acuerdo a cómo actuaron las franquicias desde que terminó la temporada regular, al día de hoy.
En esta primera edición, conocerás a los puestos 8 al 1 del ranking.
Friendly reminder: No odiamos a tu equipo. Solo queremos hacerte enojar.
Seattle será nuevamente un equipo que depende fuertemente de Russell Wilson y su capacidad de hacer magia detrás de una línea ofensiva promedio pero con un cuerpo de receptores que siguió mejorando a partir de la llegada de Eskridge para ocupar el slot. Si esta combinación será suficiente para poder mantenerse competitivo en una de las divisiones más complicadas de la liga, es aún un signo de pregunta.
En defensa, Pete Carroll deberá realizar ajustes para que la secundaria no quede tan expuesta. En ese sentido la presencia de Jamal Adams deberá funcionar como ancla para que el resto de sus compañeros eleven su juego. La garantía de Bobby Wagner en el centro también es un arma clave sobre la que todo el equipo deberá construir su mejor versión.
En la primera temporada con Kevin Stefanski al frente de este equipo, Cleveland regresó a los playoffs después de 18 años. Poco podrían pedirles los fans teniendo en cuenta este suceso. Sin embargo, este equipo está preparado para ganar. Los Browns tienen muy pocas necesidades en el roster y por el contrario, mucho talento.
El draft y la agencia libre aportaron más que nada profundidad en la plantilla, un privilegio que no muchos equipos pueden darse, dado que habitualmente priman las necesidades. Cleveland está ante la oportunidad de consolidar por primera vez en muchísimo tiempo, un equipo con mentalidad ganadora. Queda poco lugar en el tren, todavía están a tiempo de subirse.
Los Ravens se quedaron cortos la última temporada y tienen sed de venganza. Si bien tuvieron una agencia libre en la que perdieron más jugadores de los que contrataron, es un roster correctamente armado con un gran equilibrio entre jóvenes y veteranos que permiten colocar a esta franquicia entre el top-10.
Además, al GM Eric DeCosta, no le tiembla el pulso al momento de tomar decisiones y logró intercambiar al tackle Orlando Brown por una buena cantidad de picks que invirtió inteligentemente en el draft, para seguir nutriendo de talento el roster. Tienen por delante una temporada complicada, por lo que deberán mantenerse sanos y hacerse fuertes en su división si quieren meterse nuevamente en playoffs.
Uno de los mayores signos de preguntas que le quedaban a este equipo en 2020 era la posición de QB, que contaba con Jared Goff que supo llevarlos a un Super Bowl, pero que no daba certezas para un equipo que pretende competir en la nacional de forma consistente. La llegada de Matt Stafford puede abrir el playbook de Sean McVay y dar más variantes a un ataque que de a ratos parecía muy dormido.
La defensa es de las mejores de la liga, y más allá de alguna baja puntual, conserva buena parte de su esencia, con un Aaron Donald que es de las fuerzas más disruptivas de la liga. El problema de este equipo es que sigue comprometido contra el espacio salarial y dando premium picks a cambio de algunos pocos jugadores que pueden hacer la diferencia, y es razonable preguntarse cuán sostenible es este esquema.
Si Josh Allen logra mantener el nivel de la última temporada, hay pocas razones para pensar que los Bills no sean uno de los grandes contendientes para quedarse con la Americana en esta nueva temporada. La base del equipo se mantuvo gracias a una muy buena tarea del GM Brandon Beane, y la llegada de jugadores como Emmanuel Sanders siguen sumando poderío a un ataque ya muy dinámico.
En defensa McDermott demostró por qué es una de las grandes mentes del juego, y quizás en la posición de mayor debilidad, defensive end, se aseguraron dos jugadores rotacionales e incluso titulares con Gregory Rousseau y Carlos Basham. La AFC Este es, a priori, nuevamente del equipo del oeste de Nueva York, y deberá demostrar capacidad para ganarle a los Chiefs si quieren estar en el Super Bowl.
Podríamos comenzar hablando de cómo afectó la agencia libre a la línea ofensiva y lo importante que será recomponer la misma. Incluso también podemos ahondar en la necesidad imperiosa de mejorar la secundaria o encontrar armas para el QB, pero lamentablemente la discusión pasa por otro lado.
Aaron Rodgers es el centro de una novela que probablemente nos tenga en vilo hasta el training camp o incluso hasta comienzos de la temporada regular. Durante el fin de semana del draft se corrieron varios rumores de que A-Rod quiere salir de Packers y la situación parece empeorar semana a semana. ¿Será el fin de la era Rodgers en Green Bay? Stay tuned.
Andy Reid sufrió una de las palizas más contundentes de su carrera en el Super Bowl LV, y así aprendió una valiosa lección: Patrick Mahomes siempre debe estar rodeado de la mejor línea ofensiva posible. Cierto es que sufrieron lesiones y bajas por la pandemia, pero el head coach se tomó en serio esta circunstancia. Kansas City cortó a Eric Fisher y a Mitchell Schwartz, dos miembros importantes de su elenco estable, e inmediatamente comenzó a reforzar la unidad, añadiendo a Kyle Long (quien volvió del retiro) y a Joe Thuney, de destacado paso por New England. Además, consiguieron a Ronnie Stanley, uno de los mejores linieros de la liga, vía trade con Baltimore.
En consecuencia, tuvieron que dar parte de su capital en el draft, pero eso no les impidió elegir al centro Creed Humphrey y al guardia Trey Smith. Ahora que los Chiefs se ocuparon de la máxima prioridad, podrán volver a lo que hacen mejor: superar a sus rivales con la ofensiva más dinámica de toda la liga.
El vigente campeón se mantiene en la cima del ranking gracias a un trabajo sólido en la offseason. Los Bucs no tienen grandes debilidades e hicieron los deberes al retener a jugadores importantes como Shaq Barrett, Ndamukong Suh, Lavonte David, Chris Godwin, Antonio Brown y Rob Gronkowski. Así las cosas, Tampa Bay se tomó el draft con mucha calma y hasta se dio el lujo de elegir a Kyle Trask, el mariscal de la Universidad de Florida, quien tendrá el tiempo suficiente para desarrollarse bajo Tom Brady, el mejor jugador de la historia en su posición. En consecuencia, Tampa Bay comenzará la campaña 2021 con su alineación titular intacta. Hasta que en la cancha no se diga lo contrario, los dirigidos por Bruce Arians son el número uno.
Co-Founder de No Huddle. Editor, redactor y conductor de los distintos productos del medio. Sigue la NFL desde 2012 y la cubre desde 2020. Especialista en Dallas Cowboys.
Desde hace algunos años me podés encontrar en NFL Argentina en Twitter comentando partidos, y ahora me sumo a No Huddle para aportar mi granito de arena y ayudar a convertirlo en el medio líder en el deporte. Me volví aficionado al fútbol americano por casualidad, cuando me topé con el Super Bowl XLVI mientras hacía zapping una noche de verano. Tras aquel partido, comencé a seguir a los Patriots, a quienes les tuve simpatía porque perdieron en esa oportunidad. Pensé que era una buena opción, hasta que poco después me enteré que eran los más ganadores del momento... terminó siendo una gran decisión.
Economista de carrera, escritor por pasión. A los diez años mi viejo me regaló la 13 de Dan Marino y desde entonces el aqua y naranja corre por mis venas. Después de algunas temporadas de amor/odio, el deporte se convirtió en casi una obsesión. Me encanta analizar los Xs & Os y puedo invertir fácil 20 minutos de mi día mirando una sola jugada.