La temporada de la NFL está cada día más cerca y es momento de comenzar a especular con qué nos dará un un nuevo año calendario de la liga más bonita del mundo. En este caso, analizaremos los candidatos a ser los caballos negros, o equipos sorpresa, de esta temporada.
Encontrar a un QB que pueda ser titular ya es bueno, y mejor aún es si ese QB es Justin Herbert. El heredero de Rivers llegó para quedarse y demostró que no le pesa la presión de liderar a la franquicia.
El equipo “bueno” de LA recupera al mejor profundo libre de la liga en Derwin James, y promete seguir aumentando su producción ofensiva. Ganar la división suena imposible con los Chiefs siendo tan dominantes pero, ¿quién no espera ver a los Chargers volviendo a tener más de 10 victorias y entrar a playoffs como comodines? Con viento a favor soplando en la costa oeste de USA, tranquilamente podemos estar ante la presencia de un batacazo en la AFC.
Los de Ron Rivera no parecen ser los favoritos a ganar su división en la mayoría de las predicciones, luego de quedarse con la misma tras un irregular 2020. Pero la realidad es más positiva que el año pasado: el abundante talento joven es una temporada más experimentado, la situación de mariscal es mucho mejor, la defensa continúa siendo de élite en la liga y el coaching staff no ha hecho más que ayudar a cambiar la cultura en la ciudad capital. Washington tiene todo para ser el caballo negro en 2021.
Apostar a un equipo que hace un año y medio estaba jugando el Super Bowl puede parecer una salida fácil, pero los Niners vienen de cerrar el 2020 con récord negativo (6-10), últimos en una división que comparten con los renovados Rams, los siempre persistentes Seahawks y los ascendentes Cardinals. A cualquiera de ellos se le puede armar un caso firme como candidato, no solo en la NFC Oeste sino también en la conferencia y en la liga. La cuestión radica en que lo que le pasó a San Francisco el año pasado con las lesiones no es normal ni razonable. Terminó con 22 jugadores en IR, entre ellos sus QBs 1 y 2, más otras piezas clave como Trent Williams, Nick Bosa, Dee Ford y Raheem Mostert. Kittle se perdió ocho partidos y Deebo Samuel, nueve. La lista de bajas no le dio respiro en toda la temporada a Shanahan. Fue casi un año sabático para sus aspiraciones. Sin embargo, el roster en la bahía californiana es muy potente como para afrontar otra campaña pobre si la salud los acompaña. Sea con Garoppolo o con Trey Lance al mando de la ofensiva, los 49ers son capaces de llevarse por delante a cualquiera.
Pareciera que de a ratos los fans y los medios se olvidan de los 49ers. Es cierto que la temporada pasada fue sin penas ni gloria en una NFC Oeste, que siempre luce bien complicada, pero lo cierto es que el mal récord se puede explicar más en las lesiones que necesariamente en el funcionamiento. Y no fueron bajas en jugadores de rotación o en posiciones menores, involucró a casi toda la línea defensiva, a su mariscal y al ala cerrada George Kittle, una de las grandes estrellas de la NFL. Recordemos, este mismo equipo estuvo a una jugada de quedarse con el Super Bowl hace dos años.
Kyle Shanahan es una de las grandes mentes ofensivas del juego, y aunque Saleh ya no esté para coordinar la defensiva, hay materia prima para tener una gran actuación. Una de las grandes incógnitas será cuánto participará Trey Lance, novato elegido con la tercera selección global del último draft, y que deberá ganarle el lugar a Jimmy Garopolo. De no haber lesiones de por medio, espero ver a San Francisco de vuelta en los playoffs.
Creo que fervientemente que este 2021 podría ser el año de explosión de Los Angeles Chargers y ser la franquicia que le pueda arrebatarle el título de la AFC Oeste a los Chiefs. Tiene jugadores de tremenda calidad en todos los sectores del campo, un QB como Justin Herbert, que en su año de novato demostró que puede ser un talento generacional y que si sigue en su escala ascendente, podría ser un candidato al MVP de la temporada. Poseen un buen staff de entrenadores que ya no comete errores infantiles como en años anteriores. Su gran problema fue y son las lesiones de jugadores importantes. En todas las campañas previas, han perdido baluartes importantes que generaron lógicamente que el rendimiento en conjunto disminuyera. Si pueden controlar esta cuestión, podrían ser el caballo negro de la toda la NFL y ser el segundo equipo en la historia del deporte en poder jugar el Súper Bowl en condición de local.
Tal vez sería apresurado pensar en que este equipo pueda arrebatarle el cetro de campeón de la AFC Oeste a los Chiefs, pero un roster como este, con tanto talento, podría llegar lejos si accede a playoffs.
En ofensiva, Justin Herbert (ganador del Novato Ofensivo del Año 2020) demostró ser un QB que tranquilamente puede cargar con la responsabilidad que dejó Phillip Rivers. A su alrededor cuenta con una gran base de talento, con nombres importantes en las "skill positions" (Allen, Ekeler, etc) y una más que confiable línea ofensiva.
En defensa, vuelve un nombre sumamente importante como Derwin James, que se perdió la temporada pasada por una lesión en el tendón de aquiles. A esto se le suma un Kenneth Murray, en su segundo año, y Asante Samuel Jr., que querrá demostrar por qué se apostó por él en el segundo día del Draft 2021.
El año pasado fueron mi elección, y fracasaron rotundamente por varios factores, principalmente las lesiones y la mala performance de Drew Lock. Con la llegada de Surtain II esta defensa tiene potencial para ser especial, y creo que Teddy Bridgewater será eventualmente el mariscal titular. Con él a la cabeza, Denver tiene chances de sorprender a más de uno gracias a un roster muy talentoso.
Si algo le faltaba al equipo angelino era un QB potable con el que trabajar. Con Matthew Stafford consiguieron un mariscal de campo veterano, con un football IQ y brazo excelente. Si lo juntamos con el genio ofensivo Sean McVay, este matrimonio da para ilusionar a los fans de los Rams.
Recordemos además que Los Angeles tuvo la mejor defensa en la NFL la temporada pasada, y aunque el coordinador defensivo Brandon Staley partió hacia los Chargers, el talento y los nombres siguen siendo los mismos. Con un upgrade importante en el puesto de QB, y por lo tanto una mejora considerable en todo su ataque, sumado a defensiva que ya demostró ser élite, Los Angeles Rams serán un duro rival en la NFC.
Nota realizada por la redacción de No Huddle.