Los Chicago Bears están lejos de ser un equipo temido en esta NFL 2023. A pesar de la adquisición de DJ Moore durante el pasado Draft y de las distintas incorporaciones defensivas, el equipo comandado por Justin Fields no ha logrado una notable mejora en relación con el último año y si bien ya han logrado superar la cantidad de victorias del 2022 en menos partidos, su situación es muy similar.
Sin embargo, en el pasado duelo de lunes por la noche, los Bears lograron su primer triunfo divisional de la temporada ante los Minnesota Vikings tras doce derrotas consecutivas ante rivales de la división norte de la NFC. La victoria ante los actualmente comandados por Joshua Dobbs fue la tercera del equipo en partidos en primetime en tan solo cuatro encuentros disputados.
Actualmente, la posición de QB en Chicago es una incógnita, ya que si bien Fields ha tenido buenos partidos, el hecho de que los Bears cuenten por el momento con el primer pick del Draft 2024 hace que sea tentadora la posibilidad de seleccionar a un mariscal generacional como lo es Caleb Williams.
El duelo entre Chicago y Minnesota no fue el más vistoso de la temporada ni mucho menos, pero nos dejó una marca bastante peculiar. Los Bears ganaron por primera vez tras 30 años un partido sin anotar ningún touchdown, con los Atlanta Falcons siendo el anterior equipo ante el cual Chicago ostentaba esta marca.
Además, los Bears se convirtieron en el primer equipo en ganar esta temporada sin llegar a la zona de anotación, y el primero en la era Super Bowl en ganar un partido fuera de casa sin TDs, con múltiples fumbles en contra y habiendo perdido más de 75 yardas a causa de penalidades.
Fiel seguidor de la NFL desde su entrada al fútbol americano con el Super Bowl LI. Desde 2022 cubre la liga como redactor.