.jpg)
Pocos equipos han quedado a deber como lo han hecho los New Orleans Saints (5-7) en lo que va durante la presente temporada de la National Football League (NFL). La llegada de Derek Carr consolidó lo que se veía como un equipo capaz de coronarse en la División Sur de la Conferencia Nacional, quizás la más débil en toda la liga, pero que a cinco semanas de terminar la campaña están eligiendo dentro del Top 10 picks en el próximo Draft.
El próximo domingo bajo los controles estará el mariscal Jameis Winston, luego de que el titular cayó en protocolo de conmoción cerebral y con lesiones en el hombro y espalda. El problema está que el equipo no carbura desde hace rato y a lo largo del año solo han mostrado destellos de lo que son capaces de lograr. Ya hay dedos señalando al staff de entrenadores, especialmente el head coach Dennis Allen y Pete Charmichael, el coach ofensivo.
La unidad que compone el ataque de los Saints tiene todas las herramientas para brillar. Incluso en un año de bajo rendimiento ha encontrado constantes con las que ya sabían contaban, principalmente el receptor Chris Olave y el corredor Alvin Kamara. El segundo ya es de los mejores en su puesto a lo largo de toda la NFL en los últimos siete años y este domingo, en la ajustada derrota de local ante los Detroit Lions (9-3) por 31-28, logró romper el récord histórico de la franquicia de los New Orleans Saints, convirtiéndose en el jugador con más touchdowns terrestres, son 53 y contando.
Pick one favorite from @A_kamara6's Saints record 5️⃣3️⃣ rushing TD's 🔥
— New Orleans Saints (@Saints) December 5, 2023
🎥 https://t.co/KlYFEtTVGF pic.twitter.com/dfJKdHaVKc
El corredor llegó a New Orleans en el Draft de 2017, tomado con la selección 67° global en la tercera ronda. Desde entonces, y con el correr de las temporadas, se ha convertido en una de las mayores armas de doble filo en toda la NFL. Capaz de hacer daño tanto por tierra como por aire, está camino a su séptima temporada con más de 1.300 yardas totales y sin haber jugado los primeros tres partidos del año.
Estamos hablando de uno de los jugadores más versátiles que se ha visto en la última década. Con jugadas que han dejado boquiabiertos a los espectadores, tanto por su explosividad como balance fuera de lo ordinario, AK ha sido la base sobre la que construir el ataque para los Saints en los últimos años. Incluso siendo el caballito de batalla y válvula de escape cuando el director de la orquesta era Drew Brees, el legendario mariscal que luego con su excelente lectura y gran precisión soltaba el brazo en jugadas específicas.
Sus buenas actuaciones se acumulan a lo largo del tiempo y ya comenzaron a derrocar récords, desde hace rato. En su franquicia va por todo, ya que este año Kamara también se coronó como el jugador de los Saints con más touchdowns anotados, con 77 en siete temporadas, dejando atrás a receptor Marques Colston, que alcanzó los 72 en diez campañas.
A cinco partidos del cierre de la temporada regular, el futuro de los New Orleans Saints (5-7) es una incógnita. Los playoffs todavía son una posibilidad, por el hecho de formar parte de la débil NFC Sur, junto a los Atlanta Falcons (6-6), Tampa Bay Buccaneers (5-7) y Carolina Panthers (1-11) pero también lo es elegir dentro del Top 10 en el próximo Draft, hoy tienen la novena elección. Lo que sí es una certeza, es que contarán con los elementos para ser un equipo muy interesante y es innegable que Alvin Kamara es un arma de doble filo capaz de aumentar el peligro en cualquier ofensiva de la NFL.
Técnico Superior en Periodismo Deportivo cubriendo la NFL; especialista del ajedrez táctico que se juega en el fútbol americano e impaciente por analizar su primer partido al costado de la cancha. En búsqueda de vivir analizando la liga más entretenida del planeta.
