.jpg)
Pocos equipos lucieron tan bien en el comienzo de la temporada como lo habían hecho los Dallas Cowboys. El equipo de la estrella tuvo un comienzo apabullante en las primeras dos semanas de la National Football League (NFL) y el botón de re-start cayó recién en la tercera fecha luego de la derrota ante los Cardinals 28-16 en Arizona. Ante unos resilientes y efectivos Cards, los Cowboys sufrieron un golpe de realidad en su visita al desierto, con mala toma de decisiones e ineficiencia en momentos cruciales en el costado ofensivo y una mala labor a la hora de defender por la vía terrestre.
A pesar de una errática jornada, la carta de presentación para los entrenados por Mike McCarthy sigue estando en su defensa. Junto a Dan Quinn, coordinador de este departamento, formaron una de las unidades más fuertes de la NFL, que por ahora es cuarta en la liga permitiendo tan solo 262 yardas promedio por juego. Pero hay más, son el tercer equipo con menos puntos por juego recibidos con 12.7. En su debut blanquearon 40-0 a los Giants en su visita al MetLife de Nueva York y en la segunda semana permitieron solo 10 puntos en la victoria por 30-10 ante los Jets.
Caracterizados por el depredador Micah Parsons, que tiene varios números para quedarse con el Jugador Defensivo del Año, la defensa del equipo de los ´Boys viene de tener una baja más que sensible. El esquinero Trevon Diggs se rompió los ligamentos cruzados durante el entrenamiento y no jugará en lo que resta de la temporada, pero luego de su primera ausencia ante los Cardinals la defensa aérea de Dallas cumplió y debido a la profundidad que tienen en la posición de esquinero podrán amortizar el golpe.
Además, son el equipo con mejor diferencial en cuanto a entregas de balón se refiere con un +6 a su favor, son cinco intercepciones y dos balones sueltos que ha forzado su defensa, pero este domingo Dallas tuvo su primera entrega con una intercepción de Dak Prescott en zona roja. Esto se debe a una eficiente utilización del playcalling y una gran ejecución de los jugadores, como también la seguridad con la que se ha desarrollado este ataque de los Cowboys. Y en este aspecto, una de las joyas poco valoradas cómo se debe es Tony Pollard, el corredor que cargará con el ataque terrestre del equipo por tercera campaña consecutiva y que tan solo tiene un balón suelto en sus 572 acarreos en la NFL.
Gran día en la oficina para Pollard#DallasCowboys pic.twitter.com/2zq6FKxFE3
— No Huddle (@nflnohuddle) November 20, 2022
No es sorpresa que Tony Pollard sea el nuevo corredor titular en los Dallas Cowboys. Tras la marcha de Ezekiell Elliott, todos los focos se han posado sobre el egresado de Memphis, que silenciosamente viene llevando una gran producción en el ataque de los ´Boys. En la temporada regular de 2022, Pollard lideró al equipo en yardas terrestres (1.007) a pesar de no hacerlo en acarreos (193) y anotó 9 touchdowns por esa vía. Además, fue cuarto en el equipo con 39 recepciones en las que sumó 371 yardas y 3 touchdowns por aire.
Con Zeke ya establecido en New England, Pollard tiene todos los condimentos para cocinar un ácido ataque en la ofensiva de Dallas. Su versatilidad por tierra y aire, además de su explosividad y gran lectura de los huecos, se distinguen con tan solo verlo jugar unos snaps, conformando el selecto departamento de los prototipos de corredores que busca la NFL: aquellos que son capaces de hacer daño por ambas vías, tierra y aire.
Pollard le da la ventaja a Dallas#DallasCowboys pic.twitter.com/WZzQq9zrbZ
— No Huddle (@nflnohuddle) November 13, 2022
Al término de la tercera semana, Tony ya está sintiendo lo que es ser la primera carta en una ofensiva y su respuesta ha sido más que positiva. Tres juegos como titular han alcanzado a Pollard para alcanzar su récord personal de acarreos, con 25 en para 72 yardas, y también de recepciones, con 7 para 37 yardas, durante el triunfo de la semana dos ante los Jets. En la reciente derrota frente Arizona, tuvo 23 acarreos para 122 yardas y continúa liderando la liga en jugadas corridas por tierra con 62.
Pollard firmó la etiqueta franquicia, que tiene un año de duración, con los Cowboys en marzo por la suma de 10.1 millones de dólares. Dallas estuvo escéptico en darle un contrato a largo plazo, tras la fractura de peroné que sufrió en la Ronda Divisional que perdieron ante los San Francisco 49ers en los últimos playoffs. "Está realizando las pequeñas cosas que le pedimos que haga. Creo que realmente está hecho para esto", fueron las palabras del head coach Mike McCarthy en conferencia de prensa tras el juego contra los Jets. Y claro que sí, el momento ha llegado para Tony Pollard que tiene en sus manos la posibilidad para demostrar que verdaderamente es una amenaza doble capaz hacer estragos en la ofensiva de los Dallas Cowboys.
Técnico Superior en Periodismo Deportivo cubriendo la NFL; especialista del ajedrez táctico que se juega en el fútbol americano e impaciente por analizar su primer partido al costado de la cancha. En búsqueda de vivir analizando la liga más entretenida del planeta.
