Los Buffalo Bills de Josh Allen arrancaron la temporada en buena forma, desplegando un football tan sólido como inesperado. La salida de Stefon Diggs a Houston generó una gran incógnita en el ataque de los neoyorquinos. Sin un receptor estrella que atrape los lanzamientos del número 17, todo parecía indicar que los chicos de Sean McDermott sufrirían una bajada de rendimiento. Sin embargo, comenzaron con tres victorias en las primeras tres semanas, hasta que les tocó viajar a Baltimore y se toparon con Lamar Jackson y Derrick Henry.
Antes de caer frente a los Ravens por 35-10, un dato recogido por la retransmisión del Sunday Night Football alabó al quarterback de los Bills. Se trata de uno de los QBs con una de las mayores rachas sin perder un duelo por dobles dígitos, con un total de 43 partidos consecutivos en una franja de tres años (2021-2024). Solo es superado por nombres de la talla de Aaron Rodgers (48), Russell Wilson (49), Patrick Mahomes (50), Rich Gannon (52) y Tom Brady (56). En sus tres primeros encuentros de la temporada, Josh Allen logró 7 touchdowns y ninguna intercepción con un 74.4 % de pases completados. En Baltimore, el porcentaje de lanzamientos exitosos cayó a poco más de la mitad (55.2 %) y Allen se quedó sin anotar.
Es bien sabido que no conviene precipitarse sacando conclusiones en las primeras semanas de la NFL. Se trata de una liga en la que influyen muchos factores, como la forma física, la concentración, la química de la plantilla o el riesgo de lesión, estas últimas una adversidad incontrolable. Los Bills son uno de esos equipos que, a pesar de las importantes bajas de los linebackers Matt Milano y Terrel Bernard, han dado con la fórmula necesaria para ganar partidos. Con un equipo defensivo mermado aunque resolutivo, fue la ofensiva comandada por Joe Brady la que lideró a Buffalo hasta la victoria.
Josh Allen is DIFFERENT. pic.twitter.com/p5KlQZ1iXc
— Dov Kleiman (@NFL_DovKleiman) September 30, 2024
La nueva propuesta del coordinador ofensivo Joe Brady ha involucrado a un talentoso James Cook y su juego de carrera en el plan de partido, de la misma manera en la que aprovechan su variado cuerpo de receptores. Desde los pases de seguridad para el ala cerrada Dalton Kincaid o la versatilidad de Khalil Shakir en el slot hasta los lanzamientos profundos dirigidos a un gran duelista como el rookie Keon Coleman, capaz de hacerse con envíos aéreos disputados.
De poco sirvieron las buenas sensaciones previas en la semana 4, con una dolorosa derrota ante un rival de la AFC y candidato a el Super Bowl como los Baltimore Ravens. Fue Derrick Henry el encargado de romper el partido en su primera carrera, de 87 yardas, la más larga en la historia de la franquicia y que supuso un duro golpe para los visitantes. La ejecución de la jugada es perfecta, una obra de arte que ya forma parte del museo de la NFL. Todo salió rodado, desde los movimientos milimétricamente medidos del propio Henry hasta la trampa de la línea ofensiva a los defensores de los Bills.
El esquema de bloqueos empleado por los Ravens fue el 'Crunch', una mezlca del 'Trap' y 'Wham', en el que el right guard Daniel Faalele (#77) y el fullback Patrick Ricard (#42) juegan un papel fundamental. Ambos se encargan de obstruir la arremetida de los tackles defensivos. A su vez, en la segunda imagen se aprecia como el left tackle Ronnie Stanley (#79) sube al segundo nivel y deja descubierto el lado izquierdo para que el pull del left guard Patrick Mekari (#65) obstaculice al defensive end de los Bills. Lo mismo sucede con el center, Tyler Linderbaum (#64), que sube junto con Stanley para sellar a los linebackers en el lado ciego. Un movimiento que engañó a los safeties de Buffalo, que indicaron con su brazo derecho una jugada de carrera por el lado izquierdo del campo.
Fue en ese momento cuando apareció el talento del Rey. En las imágenes 3 y 4 se puede observar al tight end Mark Andrews (89#) impedir que el strong safety Taylor Rapp detenga al corredor, cuando este último detecta la carrera de Henry. Justo después, el que fuera running back de los Tennessee Titans amaga la ruta exterior con una fuerte pisada hacia la derecha, cambiando rápidamente de dirección hacia el interior y descolocando de esta manera al cornerback que quedó libre, sin que le diera tiempo a reaccionar para alcanzar al número 22 de los Ravens.
Estudiante de Periodismo en la Universidad del País Vasco. Cubre la NFL como redactor de No Huddle desde 2024. Su pasión por la NBA le llevó a conocer el fútbol americano y se enamoró de Josh Allen y los Buffalo Bills.
