Las malas noticias no paran de llegar para los New Orleans Saints que, en un año 2024 muy desfavorable y con un magro récord de 5-8 que prácticamente los deposita fuera de la postemporada, podrían perder a su quarterback titular, Derek Carr, por el resto de la campaña.
Carr salió por precaución en la ajustada victoria por 14-11 del último domingo contra los New York Giants, luego de una jugada en la que, buscando sumar yardas para una primera oportunidad, voló por el aire y aterrizó de cabeza en el césped del MetLife Stadium.
La gravedad de la lesión fue tal que el mariscal de campo no solo ingresó al protocolo de conmoción correspondiente para este tipo de situaciones, sino que además recibió atención médica por una fractura en su mano izquierda -la que, por suerte, no es su mano hábil-.
Confirmados los malos augurios en torno al estado físico de Carr, todas las miradas apuntaron al entrenador interino de los Saints, Darren Rizzi, quien deberá elegir entre Spencer Rattler o Jake Haener si es que el exjugador de Las Vegas Raiders no se recupera en el corto plazo.
En relación con esto último, las esperanzas en New Orleans siguen intactas, ya que fue el propio Rizzi quien se mostró entusiasmado con la idea de que el nacido en California pueda regresar para el final de la temporada. Sin embargo, la sorpresiva incorporación de Ben DiNucci -suplente de Dak Prescott en Dallas Cowboys- para reforzar el roster principal va en contra de todo tipo de expectativas al respecto.
La realidad es que con 33 años y diez años en la NFL, el futuro de Carr en New Orleans Saints pende de un hilo, sobre todo teniendo en consideración que el quarterback surgido de Fresno State ya padeció cuatro lesiones significativas estando en la franquicia de la NFC Sur.
El primero de los episodios tuvo lugar en la Semana 3 de la última temporada, después de sufrir un esguince en un partido contra los Green Bay Packers. Y más adelante, Carr tuvo que ingresar en el protocolo de conmoción por duplicado, tras las derrotas ante los Minnesota Vikings y Detroit Lions, respectivamente.
Ya en octubre de este 2024, el QB titular de los Saints se perdió tres encuentros por una lesión abdominal en la derrota frente a los campeones reinantes, los Kansas City Chiefs, hecho que motivó el ingreso de un Spencer Rattler que poco pudo hacer para torcer la historia de los de NOLA.
Con todos estos elementos sobre la mesa, resta saber cuál será la decisión final de Mickey Loomis, el GM de la franquicia, quien tendrá que revisar bien todos y cada uno de sus movimientos de cara a la próxima temporada para darle las mejores opciones a Rizzi -o a quien ocupe el puesto de HC en 2025-.
Periodista y CM en prensa gráfica y radio. Cubre la NFL en No Huddle desde el 2021 y es parte de los equipos de redacción y Redes Sociales.