El tren de la temporada 2024 de la NFL ha comenzado a moverse sin prisa pero sin pausa. Su recorrido oficial inició el 13 de marzo con la firma de agentes libres y llegará a la estación final el 9 de febrero de 2025, cuando en el Caesars Superdome de la ciudad de New Orleans, se dispute el Super Bowl LIX.
En la National Football League, cuando una franquicia comienza un proceso de reconstrucción, los primeros meses de esta transformación son claves y son épocas de mucha actividad. En este periodo se establecen las bases y los objetivos a corto y mediano plazo. A su vez, estas situaciones, generan mucho recambio en todos los sectores involucrados del equipo. Washington Commanders se encuentra en esta situación y por eso no resulto extraño que en lo que va de esta temporada baja se hayan producido numerosos y drásticos movimientos.
Por el lado dirigencial, el dueño de la franquicia, Josh Harris, contrató a Adam Peters, quien llega procedente de San Francisco 49ers, para que sea el nuevo General Manager. Ron Rivera fue despedido como entrenador en jefe y su lugar será ocupado por el ex coordinador defensivo de Dallas Cowboys, Dan Quinn. A su vez, Eric Biennemy, dejó su cargo como coordinador ofensivo y ahora quien decidirá las jugadas ofensivas será el ex HC de Arizona Cardinals, Kliff Kingsbury. En cuanto a los jugadores, han llegado veteranos de gran calibre tanto en ofensiva como defensiva que pasaremos a detallar a continuación.
Como dijimos anteriormente, Washington se encuentra en un proceso de transformación en todos los aspectos. Con respecto al juego, el cambio más significante es que habrá un nuevo QB bajo los comandos ofensivos. Los Commanders han dejado libre a Sam Howell y Jacoby Brisset y su lugar será ocupado por un quarterback novato. Si bien no hay certeza absoluta, es prácticamente seguro que con el pick 2 global del Draft 2024 van a ir “all in” con un mariscal rookie. Jayden Dayniels, ex LSU es quien pica en punta para ser el seleccionado y futuro abridor en la semana uno de temporada regular. Pero no solo se quedaron ahí, también contrataron a Marcus Mariota para que sea su backup y quien lo guíe y aconseje en su campaña inaugural.
Para ser efectivo en ataque debes proteger a tu QB, es la regla número uno, especialmente si estos son novatos y tienen que adaptarse a la velocidad de la NFL. Por esa razón fortalecieron la línea con las incorporaciones del centro ex Cowbyoys Tyler Biadasz y del guardia ex Kansas City Chiefs, Nick Allegretti.
En cuanto a los playmakers, firmaron a dos veteranos que cuando están sanos pueden hacer mucho daño. Austin Ekeler será el running back titular. El ex Chargers es un RB que puede generar alto impacto tanto por tierra como aire. Lo segundo podría muy importante en este año, ya que es muy posible que para evitar riesgos innecesarios, el mariscal efectué muchos pases al “check down” y ahí es donde Ekeler podría tornarse en un peligro constante para las defensivas rivales. Zach Ertz es el otro atleta firmado. Su importancia radica de dos maneras distintas: Es un TE seguro, con buenas manos y que en zona roja puede ser letal y conoce el sistema de Kingsbury, por lo cual seguramente ayudará a sus compañeros a que se adapten velozmente al estilo de juego nuevo.
En lo que respecta a la defensiva, ya todos conocemos la mentalidad agresiva que tiene el head coach Dan Quinn. Pero para poder implementar su sistema necesita armas nuevas y experimentadas en todos los sectores del campo. En las trincheras, se trajo de Dallas al Defensive End Dorance Armstrong. Quinn confía plenamente en sus capacidades y todo lo que puede rendir. En la línea media firmaron a dos linebackers de lo mejor que tiene la liga. Bobby Wagner, ex Seahwaks y Frank Luvu, ex Panthers, además de ser excelentes jugadores, son jugadores líderes tanto dentro como fuera del campo.
Cuando se busca generar una identidad en la defensiva, este liderazgo tiene un rol sumamente importante, tanto o más de lo que podrían realizar dentro del campo de juego. Es más, vale recordar que Washington contará también con seis selecciones dentro del Top 100 del próximo Draft, la mayor cantidad dentro de todos los equipos de la NFL, por lo que necesariamente debes tener caudillos que puedan guiar a la juventud que se incorporará al equipo
En la secundaria, la firma rutilante, fue la de Jeremy Chinn. Si bien no viene de buenos años en Carolina, es un safety con grandes condiciones físicas y que ya ha demostrado en esta categoría de lo que es capaz de hacer. Por último y no menos importante, firmaron al efectivo kicker Brandon McManus. En la NFL hay un viejo refrán que sintetiza la valuación de un K que dice así: “la ofensiva atrae al público, la defensiva gana los partidos y los pateadores ganan los campeonatos”. A esta altura ya nada se puede dejar librado al azar y se necesita siempre tener el mejor jugador posible dentro de las posibilidades económicas que tenga la franquicia.
Co-Founder de No Huddle. Miembro activo del fútbol americano nacional desde 1996. Conductor del programa de Football Nacional y redactor de la web.