En la historia de la NFL sobran ejemplos de dinastías que dominaron la liga, como los grandes equipos de Green Bay Packers y Pittsburgh Steelers de las décadas de 1960 y 1970 respectivamente. Ahora es el turno de repasar lo hecho por la franquicia que dominó la década de 1980: San Francisco 49ers. En esa época, el mundo de la NFL experimentó lo que muchos consideran el mejor dúo de QB-WR de la historia: Joe Montana y Jerry Rice. Además fue el comienzo de la revolución ofensiva en este deporte, dado que establecieron un ataque que hoy en día juegan la mayoría de los equipos, en el cual involucran a los corredores en juego aéreo: el denominado sistema “West Coast".
Todo comenzó en 1979, cuando el propietario Edward DeBartolo Jr. contrató al entrenador de la Universidad de Stanford, Bill Walsh, para ser su entrenador en jefe. Walsh ya tenía experiencia en el deporte profesional ya que entre 1968 y 1975 había sido el coordinador ofensivo de Cincinnati Bengals. El objetivo era claro: reconstruir el equipo y hacerlo contendiente. En su primer año como entrenador en jefe, Walsh seleccionó a Joe Montana, de la Universidad de Notre Dame, quien sería la cara de esta franquicia durante muchos años. También consiguió al receptor Dwight Clark, otro jugador que sería importante para esta reconstrucción.
Pero la primera temporada de la década no fue buena, de hecho terminaron con un record de 6-10. Una de las grandes causas de esto fue que todavía Joe Montana no era el QB abridor de forma definitiva, sino que alternaba la titularidad con Steve DeBerg. Eso sí, para finales de este año la fanaticada estaba muy entusiasmada por lo que podía ocurrir en campañas venideras porque veían el talento joven jugador y porque estaban en presencia de un ataque completamente renovado, muy difícil de defender. Utilizar a los corredores en situaciones de juego aéreo creó una confusión en las defensas, que no siempre utilizaban el esquema correcto para poder contrarrestarlo. De a poco se empezó a gestar el equipo que ganaría múltiples campeonatos después.
1981 fue el año del primer anillo de campeón. Con Montana liderando de manera indiscutida y un ataque establecido, ahora los 49ers necesitaban mejorar su defensa si querían llegar al último partido del año. Por esa razón, en ese temporada baja previa, incorporaron jugadores de ese sector de la cancha y su recompensa fue inmediata. Luego de culminar con un record de 13-3 y de vencer a New York Giants y Dallas Cowboys en playoffs, San Francisco alcanzó su primer Super Bowl. En ese juego final derrotaron a los Bengals por 26-21 y se proclamaron campeones, siendo Joe Montana el MVP del cotejo. En su primer año como titular en todos los juegos, “San José de la montaña” (sobrenombre que le decía un periodista latino de ESPN al prestigioso QB) demostró lo bueno que era en los momentos más decisivos, siempre con buenas jugadas y pases quirúrgicos en las situaciones más cruciales de los partidos
Vale comentar que en la final de Conferencia frente a los Cowboys se ejecutó una de las jugadas más espectaculares de la historia de la NFL, denominada “The Catch”. Con poco tiempo en el reloj y con los Niners perdiendo por 27-21, Montana, con mucha presión encima, lanzó el balón a la zona de gol. Allí Dwight Clark, con muchas marcas sobre el, atrapó el ovoide y sentenciaron el partido a su favor.
Luego vino una mala temporada 1982, donde lo único rescatable fue que Montana rompió un récord con una secuencia de cinco juegos consecutivos con al menos 300 yardas aéreas. En 1983 donde perdieron en playoffs contra Washington Redskins, pero en 1984 volverían las alegrías.
83 𝘿𝘼𝙔𝙎 𝙏𝙄𝙇𝙇 #NFL 𝙆𝙄𝘾𝙆𝙊𝙁𝙁
— Cooper McCoy (@CooperMcCoyRE) June 14, 2024
Best 83 yard drive in NFL history.
“The Catch” was the game-winning touchdown reception in the 1981 NFC Championship Game played between the Dallas Cowboys and the eventual Super Bowl XVI champion San Francisco 49ers at Candlestick Park… pic.twitter.com/POeNYHT1qT
La de 1984 fue una temporada inolvidable para la franquicia de la bahía, ya que ganaron quince juegos en la temporada regular y solo perdieron uno. Después de esta cantidad de triunfos, el equipo de Bill Walsh llegó a los playoffs como un gran favorito para ganar la liga y no decepcionó: en el primer juego, vencieron a Giants por 21 a 10. Luego eliminaron a Chicago Bears por 23 a 0 para ganar la NFC. En el Super Bowl XIX, se enfrentaron a los Miami Dolphins del MVP de la temporada, Dan Marino, y los derrotaron fácilmente 38 a 16. Como en su primer título, Montana fue el jugador importante de la final al sumar 331 yardas totales y tres anotaciones.
1985 no fue mal año, pero no fueron tan dominantes como la temporada anterior. Llegaron a la postemporada, pero en esta ocasión perdieron 17-3 contra los Giants de New York. Lo destacable de ese campaña fue que marcó el debut de Jerry Rice en la NFL y que el RB, Roger Craig se convirtió en el primer jugador en la historia en poder correr y recibir pases para más de 1000 yardas.
1987 fue otra temporada impresionante de los 49ers, en la que ganaron su división con una campaña de 13-3. Al equipo le estaba yendo muy bien tanto en defensa como en ataque, lo que demuestra que era uno de los grandes favoritos para llegar al Super Bowl una vez más. Sin embargo, en el primer juego de la postemporada contra Minnesota Vikings, el equipo perdió 36-24 en uno de los peores juegos de la carrera de Joe Montana. En ese duelo, terminó siendo reemplazado por Steve Young, quien entró muy bien y causó dudas sobre quién sería el dueño de la franquicia al año siguiente.
Montana. MVP.
— Kevin Gallagher (@KevG163) January 20, 2024
Super Bowl XIX, #49ers
January 20, 1985 pic.twitter.com/hbpw4EnTvZ
A pesar de la controversia sobre quien debía ser el titular en la posición más importante de la ofensiva, Walsh comenzó la mayoría de los juegos con Joe Montana y el equipo terminó la temporada regular con 10-6. En los playoffs, pudo vengarse de los Minnesota Vikings y logró una victoria fácil por 34 a 9. Contra Chicago Bears en la final de la Conferencia consiguieron un nuevo triunfo accesible por 28 a 3. Finalmente, en el Super Bowl XXIII contra Cincinnati Bengals fue éxito por 20-16, en un partido muy disputado que se definió en los últimos minutos gracias un hermoso pase de TD de Montana a John Taylor. Esta vez el MVP no fue el QB sino Jerry Rice, uno de los mejores WRs de la historia de la NFL. El receptor terminó esa final con 11 recepciones para 215 yardas y 1 TD. El entrenador Bill Walsh se retiró después de ganar ese título, dejando el trabajo al coordinador defensivo George Seifert.
En el último año de la década, la campaña de los 49ers fue inolvidable: Joe Montana acumuló 3,521 yardas aéreas, 26 TD, solo ocho INTs y terminó ganando el MVP de 1989. Jerry Rice, a su vez, también brilló con 1,490 yardas recibidas y 17 TD durante todo el año. El equipo finalizó la temporada regular con una campaña de 14-2, siendo marcado como uno de los equipos más dominantes de la década gloriosa de los 49ers. En el primer partido de playoffs, ganó fácilmente a los Minnesota Vikings por 41 a 13. Luego destruyó a Los Angeles Rams 30-3, para terminar derrotando a Denver Broncos en el Super Bowl XXIV por 55 a 10.
Este enfrentamiento marcó la última aparición de Joe Montana en esta instancia. Fue una verdadera paliza, en lo que sería la mayor diferencia en puntos en un Super Bowl en la historia de la NFL. Exuberante partido de todas las estrellas del equipo, un juego perfecto. Montana terminó con 297 yardas y cinco touchdowns, mientras que Jerry Rice recibió 7 balones para 148 yardas y tres TD.
55-10
— Kevin Gallagher (@KevG163) January 28, 2024
SUPER BOWL XXIV
A showcase for the greatness of the #49ers, the Team of the '80s
Most points scored (55) and most touchdowns (8) by one team in a Super Bowl
Largest Super Bowl margin of victory (45)
First back-to-back Super Bowl champions since the 1978-79 Steelers… pic.twitter.com/OOQo3J068C
Ya entrada la nueva década, también tuvieron una gran temporada con catorce ganados y dos perdidos, pero en los playoffs sucumbieron ante los Giants de Bill Parcells y Bill Belichick. Este partido indicó el final de una era gloriosa de los mineros y de Joe Montana como QB titular de la franquicia. Le dejó los comandos del ataque definitivamente a Steve Young.
Cuatro trofeos Vince Lombardi en diez años es sinónimo de dinastía. Muy pocos equipos en podido lograr eso y demuestra la grandeza de este conjunto. Además fueron los iniciadores de un estilo de juego muy vistoso y que genera grandes dividendos. Desde ese entonces y hasta la actualidad, San Francisco 49ers solo pudo ganar un título y fue en 1995 frente a los San Diego Chargers. Además disputó tres finales en este siglo, pero las perdió todas.
SUPER BOWL XXIX
— Kevin Gallagher (@KevG163) January 29, 2024
January 29, 1995#49ers 49, Chargers 26
Steve Young throws a Super Bowl single-game record six touchdown passes, breaking Joe Montana's record of five set in Super Bowl XXIV.
Jerry Rice and Ricky Watters each score a Super Bowl record-tying three touchdowns.… pic.twitter.com/N0EvmdEoyp
Párrafo aparte sobre Joe Montana y Jerry Rice. Inculcaron un camino y una forma de jugar a los jugadores que vinieron después. Si bien uno puede discutir si fueron los mejores en la historia en su posición, es indiscutido que fueron un espejo para los Tom Brady, Randy Moss, etc. Marcaron una ética de trabajo y conducta que van más allá de lo efectuado dentro del emparrillado. Ser el mejor jugador no siempre va acompañado de estadísticas estratosféricas, sino va asociado con el legado que se deja a los deportistas posteriores y no hay duda que este dúo fueron los grandes embajadores de este deporte.
Nota realizada por la redacción de No Huddle.