La National Football League (NFL) está a la vuelta de la esquina, y ya calienta motores para comenzar la temporada número 105 en su historia. Recapitulando lo sucedido en la campaña previa uno de los equipos que tuvo un año bisagra fueron los Detroit Lions, quienes lograron disputar su primer Campeonato de Conferencia después de 33 años, para así cortar una de las rachas activas más largas en la liga.
En Detroit están comenzando a gozar, por primera vez desde hace mucho tiempo, la cosecha de los frutos plantados estaciones atrás, más precisamente en 2021. El 14 de enero, anunciaron la contratación de Brad Holmes como nuevo gerente general, y menos de una semana después, el 20 de enero, se oficializó la firma de Dan Campbell como nuevo head coach del equipo. El cambio de aires fue evidente para el equipo de Detroit, que, además, en un intercambio con Los Ángeles Rams, obtuvo a Jared Goff y capital para el Draft, reorganizando y revitalizando su plantilla.
Las bases de lo construido empezaron a notarse en la temporada 2022, cuando en el segundo año bajo las órdenes de Dan Campbell estuvieron a un juego de obtener su primera clasificación a playoffs desde 2016. Ya el tercer año del head coach fue una inyección de adrenalina, para una franquicia que quedó a un paso de llegar al Super Bowl pero que consiguió su primer Campeonato Divisional de la NFC Norte. De cara a la próxima temporada, ya se perfilan como uno de los favoritos para pelear por el anillo.
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— Detroit Lions (@Lions) July 29, 2024
Estamos hablando de un equipo con ideas claras, capaz de ejecutar al pie de la letra todas las consignas planteadas por su cuerpo técnico. Han logrado conectar a un nivel emocional único con sus jugadores y fanáticos, fortaleciendo así a una organización que no había visto la luz en mucho tiempo, y cuando lo hizo, fue con una iluminación tenue. Desde el año 2000, los Lions son el segundo equipo que peor récord acumuló en la NFL (143-242-2).
Hoy, los reflectores están más fuertes que nunca y apuntan a un objetivo: ser campeones por primera vez. Con ese fin, Detroit trazó movimientos precisos y certeros durante esta pretemporada, desembolsando millones de dólares para amarrar a las piezas claves en el que fue catalogado como uno de los mejores ataques de la liga. Gran parte de este éxito se debe al desarrollo del entrenador ofensivo, Ben Johnson.
El dinero se distribuyó a lo largo de toda la ofensiva, empezando por Jared Goff como el que más dinero se metió en los bolsillos. El mariscal firmó una jugosa extensión por las próximas cuatro temporadas a un valor de $212 millones de dólares, contrato récord para un hombre que apenas tres años llegado a la ciudad los lideró a un lugar donde hace rato no estaban.
Otra de las piezas claves que se aseguraron los Lions a largo plazo es Amon-Ra St. Brown. El receptor tuvo un año para el recuerdo, donde logró una conexión sin igual con su mariscal y así terminar 2° en recepciones en toda la NFL (119), 3° en yardas recibidas (1515), empatado 4° en touchdowns atrapados (13); además fue 2° en yardas después de la atrapada (668) y 3° en primeras oportunidades conseguidas por vía aérea (75). Los números estrafalarios, le aseguraron ser considerado la primera opción por esta vía para el ataque de su equipo, y así firmar un acuerdo por los próximos 4 años a $120 millones de dólares.
Recommend finding a good chair and some takeout before watching 7 minutes of Amon-Ra St. Brown highlights 😏@Lions | @amonra_stbrown pic.twitter.com/YSSi6DiHkl
— NFL (@NFL) June 13, 2024
Luego, el foco se pasó a las trincheras: primero al renovar a una pieza joven y versátil, como lo es el tackle derecho Penei Sewell, por las siguientes cuatro campañas y $112 millones de dólares. Finalmente, también aseguraron al experimentado tackle izquierdo Taylor Decker, por las siguientes tres temporadas a un costo de $60 millones de dólares. Sumado a otras piezas claves y jóvenes, los Detroit Lions tienen lo necesario para volver a estar en la terna como uno de los mejores equipos de la NFL, y seguir en búsqueda de hacer historia levantando por primera vez en su historia el trofeo Vince Lombardi.
Técnico Superior en Periodismo Deportivo cubriendo la NFL; especialista del ajedrez táctico que se juega en el fútbol americano e impaciente por analizar su primer partido al costado de la cancha. En búsqueda de vivir analizando la liga más entretenida del planeta.