Jornada a jornada, la NFL nos regala ganadores y perdedores, héroes y villanos, el cielo y el infierno. Es por esto que, en No Huddle, pensamos que cada semana merecíamos premiar el esfuerzo y la dedicación que le pusieron tanto los jugadores como los equipos para sobresalir. Para lo bueno y para lo malo. No discriminamos.
¿Cuáles son estos premios?
"Se puso la 10": Jugadores con rendimientos individuales destacados.
"Correte que están jugando": Jugadores (o unidades) con rendimientos para el olvido.
"Football Champagne": Si tu equipo está en esta categoría, alegrate porque vienen bien. Tiene bebida alcohólica, no Gatorei.
"Estamos en la B": Rememorando al simpático Tano Pasman, estos son los equipos que se arrastraron por el campo.
"Parece de College": Partidos que fueron intensos hasta el final o que también tuvieron un ganador inesperado (el famoso "upset").
Sin más preámbulos, aquí están, estos son los premios de la Ronda de Comodines de la postemporada, donde elegimos al mejor de cada categoría y les explicamos el por qué.
¿Es acaso menos valioso un jugador que le da a su franquicia su primera victoria en playoffs luego de 25 años, con una actuación prácticamente perfecta? Será un debate para otro momento, pero Josh Allen sin dudas está haciendo fuerza para ser considerado el MVP de la temporada. El sábado, frente a los Colts, lideró a su ofensiva tanto por aire como por tierra. Su repertorio incluyó desde pases con una fineza y precisión sorprendentes, hasta arriesgados acarreos, yendo al choque contra varios defensivos rivales. La diferencia de este Allen con el que el año pasado quedó fuera en la misma instancia frente a Texans es casi abismal, y esa es una de las grandes razones por las que los Bills son verdaderos contendientes en la Conferencia Americana.
Se esperaba más de RW3. Y no es que debía tirar 300 yardas, tres anotaciones por aire y una más por tierra. Los juegos de playoffs suelen presentarse cerrados y se definen por detalles y era en esas pequeñas cosas en los que se esperaba que Wilson hiciera la diferencia a favor. Y no fue así. Apenas logró completar 11 pases de 27 intentos para 174 yardas. Los dos envíos de touchdown, en conexión con DK Metcalf, solo sirvieron para decorar el marcador de un juego en el que la defensa de Los Angeles Rams siempre tuvo todo bajo control. El ataque de Seattle venía en crisis y su líder pasó de candidato a MVP al premio “Correte que están jugando"... Para el bien de los fanáticos de esa franquicia, ojalá se refuerce esa línea ofensiva y se renueve el staff que coordina a dicha unidad.
Estos Bills sacaron pecho como si no les pesara haber estado un cuarto de siglo sin ganar un partido de postemporada. Frente a unos duros Colts, la ofensiva siguió andando sobre ruedas a pesar de que sobre el final sufrieron un poco más de la cuenta. Josh Allen sumó tres anotaciones (una por tierra) y más de 300 yardas aéreas, además de ser el principal corredor de su equipo (54 yardas) y de esta manera reclama votos para ser el Jugador Más Valioso. Tan valioso como esta histórica victoria de Buffalo, que desató la ya habitual locura de sus seguidores tras la jugada definitiva. Adiós a los 25 años de sequía.
Pensar que no hace muchas semanas atrás, los Steelers eran el último invicto que quedaba en toda la NFL y hoy tenemos que decir que fueron el peor equipo en todo el súper fin de semana de Wild Cards. Los Browns les metieron 28 puntos solamente en el primer cuarto, y si eso no les parece lo suficientemente desastroso para los dirigidos por Mike Tomlin, la primera jugada del partido fue un fumble luego de un centro alto que la defensiva de Cleveland transformó en touchdown. Esa jugada sería una aviso de lo que vendría después.
El resultado final, un decoroso 48-37, no le hace justicia a lo que pasó verdaderamente en el campo de juego. Roethlisberger lanzó para más de 500 yardas y cuatro touchdowns, pero también cuatro intercepciones que fueron el factor decisivo en la derrota. El juego terrestre casi que ni lo vimos, ya que al estar ante tanta diferencia en el marcador desde temprano, los Steelers se dedicaron a lanzar el balón (de ahí los 68 pases intentados de Big Ben). La defensiva también se vio superada ampliamente por los acarreos, tanto de Chubb como de Hunt, quienes corrieron como en el patio de su casa en la primera mitad. Cleveland llegaba de punto, de visitante, sin su HC, sin sus esquineros titulares y hasta con un tackle ofensivo que ni siquiera conocía a sus compañeros. Pittsburgh hizo todo para perder y para ser el peor equipo de la primera ronda de los playoffs.
El partido inaugural del primer Super Wild Card de la historia de la NFL fue sin dudas el más parejo. Realmente no hubo muchos puntos flojos en ninguno de los dos equipos: las ofensivas rindieron pero las defensivas también hicieron su trabajo. Los Colts parecieron dominar gran parte del encuentro con ataques largos pero no pudieron concretarlos y, ya sea por errores propios o por buenos ajustes de McDermott, la defensa se mostraba cada vez más firme a medida que se acercaban a la endzone.
Josh Allen ya era una superestrella, es cierto, pero contra Indianápolis la rompió y ganó su primer partido de playoffs. Fue también el primero de Buffalo desde hace más de dos décadas, lo que automáticamente lo pone como un ídolo absoluto en la ciudad de los Bills. Independientemente de cómo termine esta campaña para él y su equipo, la Bills Mafia tiene un nuevo líder que los llevará a muchas campañas exitosas con el correr de los años. Los Colts hicieron un gran papel y Philip Rivers, una vez más, se quedó corto en la postemporada. No fue su culpa, jugó muy bien y mantuvo a Indy con posibilidades hasta el final. Veremos qué depara el futuro para él y para la posición en la franquicia azul y blanca.
Estos ganadores suman puntos para que al final de la temporada se haga un conteo y haya un equipo o jugador victorioso por sección. Les deseamos suerte a todos los participantes, y que gane el mejor (o peor).
Graduado en Comunicación Social. Cubre la NFL desde 2017. Redactor de contenidos y community manager de No Huddle.
Técnico superior en Periodismo con especialización en Deportes. Editor de la página y especialista en generación de contenidos SEO en No Huddle. Comenzó a mirar NFL en 2011 y cubre el deporte desde 2020.
Empecé a seguir la NFL allá por 1989, y por el encanto que tiene la ciudad de Seattle de inmediato me convertí en fanático de los Seahawks. Escribo crónicas periodísticas y participo de los podcasts. Me obsesiona la estrategia que domina al football americano tanto dentro como fuera del campo de juego. Creo que la NFL representa al deporte del futuro en su combinación exacta de fuerza, habilidad e inteligencia.
Periodista deportivo especializado en gráfica. Sigue la NFL desde el 2002 y el College Football desde 2014. Es redactor en No Huddle desde 2020.