La situación en Pittsburgh Steelers tomó un giro inesperado tras la revelación de que el head coach, Mike Tomlin, confirmó a Russell Wilson como titular para el próximo partido contra los New York Jets. A pesar del buen rendimiento de Justin Fields en lo que va de la temporada, incluyendo una convincente victoria ante Las Vegas Raiders, Tomlin parece decidido a darle la oportunidad a Wilson, quien no juega desde la pretemporada debido a una lesión en la pantorrilla.
Wilson, un veterano de la NFL y nueve veces seleccionado al Pro Bowl, fue originalmente nombrado como el mariscal de campo titular al comienzo de la temporada. Sin embargo, una lesión en la pantorrilla que se agravó a principios de septiembre lo dejó fuera durante las primeras cinco semanas de la campaña. En su ausencia, Justin Fields asumió el control de la ofensiva y comandó a los Steelers a través de un sólido récord de 4-2, lanzando para 1.106 yardas y cinco touchdowns.
A pesar de este éxito, Tomlin decidió devolverle la titularidad a Wilson, quien comenzó a tomar repeticiones con el primer equipo durante las prácticas. "Russell demostró estar sano la semana pasada, y lo estamos evaluando esta semana", afirmó Tomlin. Su decisión refleja el valor que los Steelers aún ven en Wilson, considerando su vasta experiencia y habilidad para liderar ofensivas competitivas.
Una de las posibilidades que planteó Tomlin es la implementación de un sistema de dos quarterbacks. Esto implicaría diseñar paquetes específicos para Fields, aprovechando su capacidad atlética y movilidad, mientras que Wilson asumiría la mayor parte de los snaps. Aunque esta estrategia puede sonar innovadora, rara vez demostró ser efectiva en la NFL.
El uso de dos quarterbacks puede generar confusión en el ritmo ofensivo y, sobre todo, afectar la confianza de los jugadores. Si bien Fields demostró una gran mejora, interrumpir su continuidad con un sistema compartido podría complicar el desarrollo de la ofensiva de los Steelers. La falta de consistencia en la toma de decisiones de los entrenadores, como esta, suele resultar en un equipo ineficiente.
Históricamente, los equipos que optaron por una rotación de mariscales de campo tuvieron dificultades para mantener una dinámica ofensiva fluida. La falta de continuidad en el liderazgo del equipo puede llevar a problemas de sincronización entre los receptores y los quarterbacks. Además, introducir diferentes estilos de juego con dos quarterbacks tiende a complicar la ejecución y genera predecibilidad, lo que facilita a las defensas ajustar sus esquemas.
En medio de esta situación, el veterano entrenador Bill Belichick ofreció una advertencia sobre la decisión de los Steelers de devolverle la titularidad a Wilson. En un episodio reciente del Coach Podcast, Belichick expresó sus dudas sobre si Wilson está realmente listo para asumir el liderazgo del equipo después de varios meses sin juego activo. "Russell es un quarterback veterano, pero no ha tenido el tiempo de práctica ni los snaps en vivo", comentó. "Es difícil volver en este punto de la temporada sin haber tenido esas repeticiones".
Belichick, quien cuenta con seis títulos de Super Bowl como entrenador, subrayó que solo haría un cambio de quarterback si estuviera absolutamente seguro de que resultaría en una mejora considerable para el equipo. En este caso, sugiere que los Steelers están tomando un riesgo innecesario al alterar una fórmula que ha sido exitosa con Fields al mando.
La principal preocupación de Belichick es la falta de ritmo que podría experimentar Wilson al regresar a la acción después de su prolongada ausencia. Sin los snaps en vivo de pretemporada y habiendo estado fuera de juego hasta la semana 6, existe la posibilidad de que Wilson necesite tiempo para adaptarse al ritmo de juego, lo que podría generar inconsistencias en la ofensiva de Pittsburgh.
A pesar de los logros de Russell Wilson a lo largo de su carrera, es comprensible que haya dudas sobre su capacidad para reintegrarse al equipo de manera efectiva en este punto de la temporada. La ofensiva encontró un buen ritmo con Fields, quien demostro su capacidad tanto como pasador como corredor. Además, interrumpir el proceso de crecimiento de Fields podría ser contraproducente para su desarrollo a largo plazo.
Coach Tomlin has named Russell Wilson as the starting quarterback. pic.twitter.com/REWKkybpNo
— Pittsburgh Steelers (@steelers) August 28, 2024
Si bien es innegable que Wilson aporta experiencia y liderazgo, el equipo deberá manejar cuidadosamente la situación para no generar una división en el vestuario ni afectar la confianza de Fields. Si los Steelers deciden implementar un sistema de dos quarterbacks, deberán ser muy precisos en su ejecución para evitar que el cambio constante de mariscales desestabilice la ofensiva.
En última instancia, esta es una decisión que Mike Tomlin tomó siguiendo su linea de comienzos de temporada. Sin embargo, como advirtió Bill Belichick, alterar la dinámica de un equipo que encontró cierto éxito a mitad de temporada siempre conlleva un riesgo. Si bien la calidad de Wilson como jugador está fuera de discusión, el momento de su regreso es lo que genera incertidumbre.
Lic. en Relaciones Internacionales. Redactor y columnista para varios medios. Apasionado de la NFL y del College Football. Editor en No Huddle a partir de 2024.