La llegada de Ben Johnson como entrenador de Chicago Bears está generando un aire renovado en una franquicia que, históricamente, estuvo definida más por su defensa que por su capacidad ofensiva. Sin embargo, detrás del entusiasmo hay un desafío monumental: terminar con una racha de más de cuatro décadas sin estar entre las cinco mejores ofensivas de la NFL, algo que no ocurre desde 1977.
Johnson, de 38 años, se presenta como el estratega indicado para liderar esta transformación. Durante su etapa como coordinador ofensivo de Detroit Lions, su impacto fue inmediato. Entre 2022 y 2024, los Lions terminaron cuarto, tercero y segundo en ofensiva total, cimentando su reputación como una de las mentes más creativas de la liga. Bajo su mando, Detroit no solo se consolidó como una ofensiva explosiva, sino que también revitalizó la carrera de Jared Goff, quien registró tres temporadas consecutivas con más de 4.000 yardas, el mejor promedio de su carrera.
En Chicago, Johnson trabajará con Caleb Williams, la primera selección del draft de 2024, un mariscal de campo cuyo potencial promete ser el eje de un ataque rejuvenecido. “Esta ofensiva será construida pensando en Caleb”, afirmó Johnson durante su presentación en Halas Hall.
A new era in Chicago.
— Chicago Bears (@ChicagoBears) January 21, 2025
Welcome to the Bears, Coach! 🐻⬇️
A diferencia de otros entrenadores que replican esquemas sin considerar las características de sus equipos, Johnson dejó claro que no habrá un “copia y pega” de su sistema en Detroit. Su visión es construir un ataque adaptado a las fortalezas de Williams y al talento de la plantilla. “No estamos simplemente desempolvando un viejo libro de jugadas. Vamos a deconstruir esta ofensiva hasta los cimientos para edificarla alrededor de Caleb y de los jugadores que lo rodean”, explicó.
Entre los objetivos inmediatos, Johnson destacó la necesidad de reforzar la línea ofensiva, un punto débil que contribuyó a que Williams fuera capturado 68 veces en su temporada de novato, la cifra más alta de la liga. El entrenador también subrayó la importancia de establecer una cultura de responsabilidad y trabajo en equipo que fomente el crecimiento individual y colectivo.
Johnson describió a los Bears como un "gigante dormido". Desde su perspectiva como coordinador en Detroit, siempre consideró que Chicago tenía las piezas para ser un contendiente serio, pero carecía de dirección. Ahora, su misión será maximizar ese potencial y convertir a los Bears en una ofensiva temida en la NFL.
El camino no será fácil, pero con Johnson al mando, los Bears podrían estar más cerca que nunca de romper con décadas de mediocridad ofensiva. Si logra replicar su éxito con los Lions y adaptar su sistema a las necesidades de su nuevo equipo, Johnson podría ser el arquitecto de una de las transformaciones más significativas en la historia reciente de la NFL.
Lic. en Relaciones Internacionales. Redactor y columnista para varios medios. Apasionado de la NFL y del College Football. Editor en No Huddle a partir de 2024.