La temporada 2023/24 de la NFL dejó muchas sorpresas por el lado negativo y otras tantas que fueron increíbles. Una de las noticias buenas de la liga fue el trabajo que realizó el coach novato Shane Steichen al mando de sus Indianapolis Colts y con su QB suplente. No obstante, ahora el piso ha quedado demasiado bajo para las expectativas puestas en la franquicia.
A falta del Draft, la offseason se cumple de manera aceptable, y como siempre se carectizó la franquicia, silenciosamente. En este sentido, los Colts renovaron a su mejor receptor, Michael Pittman Jr., al esquinero Kenny Moore y al LB Zaire Flanklin, pieza fundamental en la defensiva. Además, tendrán de regreso a su mayor apuesta del 2023, el QB Anthony Richardson, ya recuperado para el inicio de la temporada.
No obstante, no todo es perfecto para la franquicia. Por un lado, la salida de Zack Moss diluye el tandem alrededor de Jonathan Taylor y el ex Buffalo Bills. Por otro, la sensación que ha dejado los Colts fue una muestra de la división en sí, hoy una de las más disputadas de la liga. De esta manera, la franquicia ha construido una base para el roster y sin muchas piezas que tocar, es hora de agregar playmakers para hacer la diferencia en la carrera por el título divisional.
A pesar de la lesión de Richardson, a una victoria del título divisional y en consecuencia de los Playoffs, estuvieron los Colts la pasada temporada. Mientras que la diferencia entre los Houston Texans y los Colts en enero pasado era solo una victoria, la franquicia de Houston ha logrado obtener una ventaja considerable gracias a una sólida inversión en la agencia libre. Dada esta situación, es crucial que los Colts no subestimen la importancia del Draft como principal vía para adquirir jugadores que marquen la diferencia y fortalezcan el equipo.
Los Colts no pueden depender únicamente de Kenny Moore y del recientemente renovado safety Julian Blackmon. Mientras tanto, los Texans han fortalecido su equipo con la incorporación de Stefon Diggs. Además, Brian Callahan, quien anteriormente trabajó como coordinador ofensivo para los Cincinnati Bengals, conocidos por su juego aéreo, ahora está en Tennessee Titans, junto con Calvin Ridley. Es crucial que la franquicia busque opciones en el draft, especialmente en términos de esquineros, lo que permitiría a Moore moverse hacia el slot y mejorar la profundidad del equipo en esa posición.
Aunque la renovación de Michael Pittman Jr. es un paso en la dirección correcta, puede que no sea suficiente para impulsar significativamente el juego aéreo. La selección de segunda ronda de 2022, Alec Pierce, ha decepcionado hasta el momento, registrando solo 514 yardas y 2 touchdowns en dos temporadas, lo que está por debajo de las expectativas de la franquicia para él. La profundidad del cuerpo es también una deuda pendiente para la franquicia.
Zack Moss fue una pieza circunstancialmente de gran importancia para la franquicia. De cara a la temporada, toda la responsabilidad sobre el juego terrestre no podrá caer sobre Jonathan Taylor, como tampoco exponer drásticamente a Richardson al contacto que se refiere un juego pesado al RPO. Un plan B será necesario para la franquicia.
Actuario. Analista de Datos. Especialista de Safeties en Guia No Huddle 2023.