Indianapolis es la otra ciudad que tendrá nuevo coach proveniente de las filas del subcampeón Philadelphia Eagles, Shane Steichen. Esto es así luego de una desastrosa temporada 2022, en la que los Colts terminaron con récord de 4-12-1. En esta, ningún receptor rompió la marca de las mil yardas, la temporada del corredor estrella Jonathan Taylor fue detenida temprano por lesión (si bien hasta entonces estaba teniendo un noble desempeño) y room de QBs fue una decepción, con un Matt Ryan lejos de su mejor fútbol, y unos suplentes que poco supieron hacer.
La defensa tampoco hizo mucho para colaborar desde el fondo del ranking, hubo alguna que otra aparición especial de Stephon Gilmore (quien ya ni está en el plantel) pero poco ayudó al récord final y al ahora ex-HC Frank Reich, quien fue despedido a mitad de temporada y reemplazado por el ex-centro Jeff Saturday, quien ganó un partido de sus 8 al mando del equipo.
Esta offseason, el GM Chris Ballard decidió contratar a Steichen, un coach ofensivo y con conexiones a Nick Sirianni (actual HC del equipo de Philadelphia y ex-coordinador ofensivo de Colts), con el que buscará encontrar a un QB que lidere la franquicia esta próxima década. Una posición que aún le da pesadillas a los fanáticos de Indianapolis, desde el retiro de Andrew Luck en 2019. Las adquisiciones de Samson Ebukam y Taven Bryan buscan renovar la rotación de pass rushers liderada por Deforest Buckner y Kwity Paye.
Las necesidades de Indianapolis Colts para 2023
Necesidades: QB, WR, CB
El plantel de Indianapolis está cubierto de talento en la mayoría de sus posiciones, por lo que el dicho "a un quarteback de un campeonato" es súper familiar para sus fanáticos. El QB room está integrado por Sam Ehlinger, Nick Foles y Gardner Minshew II (un 66% de los QBs de los Eagles del 2019), por lo que es más que imaginable que en el draft decidan reforzar esta posición con un potencial líder de la franquicia. Ehlinger ha mostrado poco, Foles ha logrado mostrar aún menos, y Minshew se encuentra una oportunidad que debe aprovechar para demostrar a la liga que no es el nuevo Ryan Fitzpatrick, sino que más. Ya sea como mentor de un novato o como titular indiscutido del equipo.
A la vez, tomen los Colts un QB o no, la realidad es que necesitan reforzar el elenco de receptores. Michael Pittman es un jugador muy útil, pero necesita ayuda. La primer temporada de Alec Pierce demostró que aún tiene mucho que mejorar, y Isaiah McKenzie es simplemente una veloz curita que permitirá abrir más el campo de juego. Por lo que un receptor de buenas manos le vendría ideal a una ofensiva que también contará con Mo Alie-Cox y Jelani Woods como los alas cerradas principales.
Por último, la salida de Gilmore deja una oportunidad para quien decida dar el paso adelante y tomar el puesto. Por lo que la adición de un prometedor CB de una clase bastante densa de potencial aparenta ser una decisión ideal. En especial teniendo en cuenta la tendencia de Kenny Moore de ocupar el slot, que dejaría a Isaiah Rodgers y Dallis Flowers como los top CBs del plantel.