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Con un tercio de la temporada aún por jugarse, no es de extrañarse que abunden los candidatos a quedarse sin empleo en los próximos meses. Josh McDaniels y Frank Reich no pudieron terminar sus campañas con Las Vegas Raiders y Carolina Panthers, respectivamente, pero definitivamente no serán los únicos entrenadores en jefe que deberán actualizar su perfil en LinkedIn.
De acuerdo con Jordan Schulz de Bleacher Report, tan solo un milagro podría evitar que Brandon Staley permanezca con Los Angeles Chargers más allá de esta temporada. Y, tal como hemos visto muchas veces en esta liga, ‘milagro’ y ‘Chargers’ son palabras que rara vez van de la mano.
Una de las pocas excepciones involucra, precisamente, a Staley. Verlo sobrevivir y conservar su empleo tras dejar ir una ventaja de 27 puntos en un partido de playoffs fue, cuando menos, milagroso. Ahora, casi un año después, parece poco probable que los santos y los dioses del emparrillado vuelvan a interceder por él.
El periplo de Staley a cargo de los Chargers empezó con algo de promesa. Un récord de 9-8 en 2021 parecía buen negocio, considerando el talento de Justin Herbert y que era un equipo joven con un futuro brillante. Sin embargo, tres derrotas en los últimos partidos les costaron un boleto a playoffs. Mal presagio.
La siguiente temporada estuvo llena de sinsabores. El récord de 6-6 era poco menos que decepcionante, pero aun así, y a pesar de las lesiones, lograron terminar la temporada con récord de 10-7. Sin embargo, cinco de esas derrotas llegaron por un touchdown o menos, y varias con drives ganadores de último minuto. Una vez más, mal presagio.
Del partido de postemporada ya conversamos y, por el bien de los seguidores de los Chargers que nos leen, no volveremos a mencionarlo. Pasando la página a 2023, el equipo no ha mostrado señales de mejoría, ostentando un récord de 4-7 que se explica, una vez más, con un 2-5 en partidos decididos por menos de una anotación.
Bien podemos hablar de que Justin Herbert también ha quedado a deber cuando el momento apremia. Su toma de decisiones, por lo general bastante buena, se vuelve errática y es más propenso a perder el ovoide. Sin embargo, Staley ha dejado mucho que desear desde que asumió, tomando un enfoque hiperagresivo cuando no debe y siendo más bien conservador cuando tendría que tomar riesgos. Asimismo, se suponía que Staley era el tipo indicado para enderezar el curso de la defensiva en Los Angeles, sin embargo, son el equipo que permite más yardas por partido esta temporada.
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La presencia de Kellen Moore, quien ha estado muy cerca de convertirse en Head Coach en un par de oportunidades, hace que la salida de Staley sea aún más plausible. Bien podrían tener un reemplazo en casa que les dé un poco de continuidad y ponga el énfasis en su mayor virtud, que, claramente, es el lado ofensivo del terreno.
Sea cual sea el caso, no faltarán candidatos interesados en dirigir a uno de los QB más prometedores de la liga, vivir bajo el cálido clima de la Costa Oeste, y disfrutar de la paciencia de una gerencia que ha demostrado que cree en las segundas y terceras oportunidades.
Psicólogo deportivo y redactor desde hace 8 años. Especialista en NBA, NFL y MLB. Colaborador en No Huddle desde 2022.
