La temporada 104° de la National Football League (NFL) está llegando a su fin, con las Finales de Conferencia próximas a disputarse el fin de semana, son solo cuatro franquicias las que siguen en carrera para hacerse con el tan ansiado trofeo Vince Lombardi. Que se pondrá en juego el domingo 11 de febrero en Las Vegas, cuando el campeón de la Conferencia Americana y Nacional se enfrenten en el Super Bowl LVIII.
Pero para ello hay tiempo, y nos queda un plato muy fuerte. Donde los Detroit Lions visitarán a los San Francisco 49ers por el título de la NFC, mientras que en la AFC los Kansas City Chiefs, con un Patrick Mahomes récord, visitarán a los Baltimore Ravens. El equipo en mejor forma de toda la NFL que goza de su mariscal Lamar Jackson a nivel MVP, y una defensa que recuerda a la campeona del 2001.
Del otro lado, los Chiefs están por disputar su sexta Final de la AFC. Sí, la sexta. Desde que asumió como titular en 2018, Patrick Mahomes puso a los Kansas City Chiefs en la Final de la Conferencia en seis campañas al hilo, siendo el primer mariscal de la historia en lograr dicho registro. Con un 60% de éxito, lograron conseguir tres tickets al Super Bowl. Y gritaron campeón dos veces: contra San Francisco en la temporada de 2019 y en la más reciente 2022 contra los Philadelphia Eagles, mientras que se quedaron con sabor amargo en Tampa Bay, cuando perdieron contra los Bucs de Tom Brady en 2020.
Este mundo le pertenece a Patrick Mahomes, nosotros solo tenemos la suerte de habitarlo.
— No Huddle (@nflnohuddle) January 22, 2024
6 temporadas. 6 finales de conferencia. La #NFL se rinde a sus pies. pic.twitter.com/gklpFbQTNS
Si bien Patrick Mahomes es uno de los mariscales más sorprendentes que la NFL haya visto. Todo cobra sentido cuando las piezas del rompecabezas las encaja Andy Reid, head coach de los Chiefs desde 2013, que ha dado con la receta perfecta para potenciar los dotes de su estratega. En la agonía del partido de la Ronda Divisional, en el que vencieron de visita a los Buffalo Bills, fue la unidad defensiva de Steve Spagnuolo la que se hizo fuerte, sin permitir al ataque comandado por Josh Allen sumar puntos en todo el último cuarto.
Lo demostraron con más ímpetu en la Ronda de Comodín, cuando limitaron a un solo touchdown y 264 yardas totales a los Miami Dolphins. La presión llega en el momento justo por parte de la gran línea defensiva que tienen los Chiefs, comandada por Chris Jones y George Karlaftis. No solo eso, sino la efectividad con la que Spagnuolo manda las cargas con su secundaria, con jugadores como Justin Reid y Mike Edwards.
Durante la temporada regular fueron la segunda unidad que menos yardas (298.8) y puntos (17.3) permitió por juego. Pero en la otra cara de la moneda, la ofensiva también ha cumplido con sus deberes. Poniendo 27 unidades en el tanteador del HighMark Stadium de Buffalo, y otros 26 cuando jugaron de local en el ArrowHead Stadium durante la primera ronda. Sin Eric Bienemy, y sin Tyreek Hill el ataque de Kansas City perdió explosividad, pero aun así se las ingenia para seguir sumando puntos.
A Reid le alcanza y sobra partiendo desde las bases. Con el dúo Mahomes-Kelce, que se convirtió el pasado domingo en la pareja con más combinaciones para pases de touchdown en la historia de la postemporada (16), superando a Brady-Gronkowski (15). Sumado a eso, la ecuación se va poniendo más compleja para las defensivas contrarias, cuando su mariscal logra conectar con factores como Rashee Rice, Noah Gray y Justin Watson. Y son indetenibles cuando consiguen asentar la producción terrestre mediante las piernas de Isiah Pacheco.
Los Chiefs tienen el rodaje y la experiencia del roce en playoffs. E irán a Baltimore a arrebatarles el título de la AFC a unos Ravens que son los favoritos, pero si hay algo que estos últimos seis años hemos aprendido: hasta que el reloj no esté en cero, los de Kansas City siempre tendrán una última vida bajo el brazo de Patrick Mahomes.
Técnico Superior en Periodismo Deportivo cubriendo la NFL; especialista del ajedrez táctico que se juega en el fútbol americano e impaciente por analizar su primer partido al costado de la cancha. En búsqueda de vivir analizando la liga más entretenida del planeta.