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La inesperada derrota de Alabama ante Vanderbilt por la semana 6 del College Football, con un marcador de 40-35, generó preocupación entre sus seguidores y el cuerpo técnico. La defensa de los Crimson Tide, históricamente sólida bajo el mando de Nick Saban, parece haber perdido consistencia tras la transición a un nuevo esquema defensivo dirigido por Kane Wommack. En este sentido, las preguntas sobre la capacidad de Alabama para detener el juego terrestre resurgieron, y el partido del sábado pasado dejó claro que aún queda mucho trabajo por hacer.
Tras la salida de Saban, Alabama dio un giro importante en su dirección táctica. Kalen DeBoer, nuevo head coach, delegó la responsabilidad defensiva en Wommack, cuyo esquema "Swarm Defense" (defensa de enjambre) generó grandes expectativas, pero también algunas dudas.
Si bien Alabama arrancó la temporada con un sólido desempeño defensivo, limitando a sus rivales a solo 33 puntos en los primeros 14 cuartos, los últimos seis cuartos han sido complicados. En ese tramo, los Crimson Tide permitieron 67 puntos, y la derrota ante Vanderbilt dejó al descubierto las grietas en el sistema.
Vanderbilt no necesitó números impresionantes para controlar el partido. Con una media de 3.1 yardas por acarreo, y una estrategia basada en mantener el control del balón, los Commodores lograron dominar el reloj, ejecutando 75 jugadas y manteniendo la posesión durante 42 minutos. Esta estrategia dejó a la defensa de Alabama sin respuestas, permitiendo que el mariscal de campo de Vanderbilt, Diego Pavia, completara el 80% de sus pases sin recibir ninguna presión por parte de la defensa.
Uno de los mayores problemas para Alabama fue su incapacidad para frenar a Vanderbilt en situaciones de tercera oportunidad. Los Commodores convirtieron 12 de 18 intentos en tercer down, un número preocupante para un equipo que, hasta ese partido, era una de las mejores defensas en esas situaciones. Wommack destacó la necesidad de mejorar en la asignación de responsabilidades defensivas y la intensidad en los tacleos, áreas en las que Alabama falló repetidamente el sábado.
La defensa registró siete tacleadas para pérdida de yardas, pero eso no fue suficiente para detener el ataque de Vanderbilt. Más preocupante aún fue la falta de presión sobre Pavia, ya que Alabama no logró ni una sola captura ni forzó errores clave como balones sueltos o intercepciones. DeBoer admitió que este tipo de errores son inaceptables para un equipo con las aspiraciones de Alabama.
Sin embargo, el head coach de Alabama, mantiene la calma en medio de la tormenta. Durante su conferencia de prensa, el entrenador insistió en que el equipo está comprometido con mejorar y no ceder ante la presión: "Estamos frustrados, pero no vamos a perder la calma", comentó.
PAVIA. FIRST DOWN pic.twitter.com/lneJhuQFyU
— Vanderbilt Football (@VandyFootball) October 5, 2024
DeBoer señaló que no hay espacio para el pánico y que su equipo debe enfocarse en corregir los errores, especialmente en lo que se refiere a la ejecución en situaciones clave. A su vez, destacó que errores como las penalizaciones y la falta de enfoque también jugaron un papel importante en la derrota ante Vanderbilt. "No podemos permitirnos dejar que pequeños errores se conviertan en grandes problemas", afirmó.
A medida que avanza la temporada, Alabama enfrenta un gran desafío: ¿puede su defensa adaptarse y mejorar lo suficiente para mantener vivas sus esperanzas de playoffs? Con Kane Wommack a la cabeza de la defensa, el equipo necesita recuperar su intensidad y su capacidad para frenar la carrera. Aunque el nuevo esquema defensivo ha sido criticado, DeBoer sigue confiando en que el problema no radica en el sistema, sino en la falta de consistencia y ejecución por parte de los jugadores. Lo cierto es que Alabama no tiene margen de error.
La próxima prueba será contra South Carolina, y el equipo deberá mostrar una mejora si quiere revertir la narrativa de las últimas semanas. El tiempo dirá si los ajustes de Wommack y la dirección de DeBoer son suficientes para que Alabama vuelva a ser la fuerza dominante que siempre ha sido.
Lic. en Relaciones Internacionales. Redactor y columnista para varios medios. Apasionado de la NFL y del College Football. Editor en No Huddle a partir de 2024.
