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Con el fútbol americano universitario entrando en una era de constantes cambios luego de terminada la temporada 2024, los Longhorns de Texas aseguran estabilidad en su programa al renovar el contrato de Steve Sarkisian. El entrenador, pieza fundamental en el resurgir de Texas, seguirá al mando hasta 2031 tras firmar una extensión que lo posiciona entre los mejores remunerados de la NCAA.
La decisión llega en un momento importante. Según reportes, Sarkisian rechazó ofertas de dos franquicias de la NFL, reafirmando su compromiso con el programa que lidera desde 2021. Desde su llegada, los Longhorns no solo han vuelto a ser competitivos, sino que alcanzaron dos veces consecutivas las semifinales del College Football Playoff.
Cuando Sarkisian asumió el mando, Texas venía de una decepcionante temporada de 5-7. En cuatro años, el entrenador acumula un récord de 38-17, incluido un título de la Big 12 en 2023 y una destacada transición a la SEC, una de las conferencias más exigentes del fútbol colegial. En 2024, los Longhorns terminaron con un registro de 13-3, consolidándose como uno de los programas más sólidos del país y el único representante de la SEC en el Playoff.
La extensión de contrato no solo agrega un año a su acuerdo, sino también un aumento salarial que lo coloca cerca de gigantes como Kirby Smart y Dabo Swinney. Esta renovación es la segunda en dos años para Sarkisian, quien había firmado un incremento significativo en 2023 tras ganar el campeonato de la Big 12.
El interés de la NFL no es casualidad. Conocido por su mente ofensiva, Sarkisian demostró su habilidad para maximizar el talento, tanto en el campo como en el reclutamiento. En una era donde los entrenadores universitarios son cada vez más tentados por el profesionalismo, su decisión de permanecer en Texas refleja una apuesta a largo plazo por el éxito del programa.
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Sarkisian fue enfático en su visión. "Texas es un lugar especial, y todavía tenemos mucho por lograr", afirmó tras anunciarse la extensión. Su continuidad asegura también la transición hacia una nueva etapa con Arch Manning, quien asumirá el puesto de quarterback titular tras la partida de Quinn Ewers al Draft de la NFL.
El impacto de Sarkisian va más allá de las victorias. Texas lidera las clasificaciones de reclutamiento para 2025, cimentando su reputación como uno de los programas más atractivos para los prospectos de élite. Además, la presencia constante de jugadores Longhorns en el Draft de la NFL reafirma su capacidad para desarrollar talento al más alto nivel. Con la extensión de Sarkisian, los Longhorns consolidan un proyecto que busca no solo competir, sino dominar en el escenario más grande del fútbol colegial.
Lic. en Relaciones Internacionales. Redactor y columnista para varios medios. Apasionado de la NFL y del College Football. Editor en No Huddle a partir de 2024.
