Los Atlanta Falcons han tenido una de las peores temporadas bajas entre todos los equipos de la NFL. En primer lugar, cuando parecía que la salida de Calvin Ridley era un hecho, la NFL dio a conocer que, el receptor que se alejó del futbol americano para concentrarse en salud mental y fue baja casi todo el 2021, fue suspendido por tiempo indefinido para la temporada 2022 por apostar en cinco juegos de la NFL durante noviembre pasado. Por otro lado, la franquicia estuvo entre los equipos finalistas para hacerse de los servicios de Deshaun Watson y de esa manera terminar con el periodo de Matt Ryan en Georgia. Cuando parecía que Watson sería el nuevo mariscal de los Falcons, una oferta irresistible desde lo económico inclinó la balanza para que los Browns sean su nuevo hogar. La novela mediática que se generó desgastó la relación de Ryan con la franquicia y el quarterback decidió marcharse a los Colts tras 14 años, mediante un trade que le dejó un pick de tercera ronda a los Falcons.
Entre las firmas destacadas se encuentra la renovación de Cordarrelle Patterson, que sorprendió a propios y extraños y se transformó en el arma más importante tanto por tierra como por aire. Además, la llegada de Casey Hayward refuerza una secundaria necesitada y junto a AJ Terrell, los Falcons tendrán una de las parejas de cornerbacks más interesantes de la liga. Por último, la salida de Matt Ryan hizo que Arthur Smith recurra a un viejo conocido y la franquicia firmó por dos años a Marcus Mariota para que se haga cargo de este periodo de transición.
De cara al draft 2022, la franquicia tendrá un pick top 10 (#8) por segundo año consultivo y además encararán un segundo día con dos picks de segunda (#43 y #58) y tercera ronda (#74 y #82). De esta forma, el General Manager, Terry Fontenot, y Arthur Smith tendrán una oportunidad única para continuar una necesaria reconstrucción que comenzó con la partida del quarterback más importante en la historia de la franquicia.
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— NFL (@NFL) March 21, 2022
En el pick 8, la decisión podría ser diferente ahora que no tienen un QB franquicia y que su mariscal titular será Marcus Mariota. La mejor decisión que podrían tomar los Falcons es no desperdiciar un pick tan alto en un quarterback de una clase que excita a muy pocos. Ante el hype generalizado por Malik Wills, el QB de Liberty, es probable que Atlanta deba subir para tomarlo, lo que sería un grave error teniendo en cuenta que Falcons no está en posición negociar picks futuros ante la gran cantidad de necesidades que debe abordar en su equipo.
Siendo sinceros, el interior de su línea ofensiva es lo que más ayuda pide. Aunque fue abordada en draft anteriores, el rendimiento de la unidad fue caótico al ubicarse como la número 29 de la NFL en presiones al quarterbacks permitidas. Las opciones más seductoras son el tackle de North Carolina State, Ikem Ekwonu, o el egresado de Alabama, Evan Neal, quienes encajarían perfectamente en el esquema de juego que Arthur Smith quiere implementar dadas sus capacidades para dominar el juego terrestre.
Adicionalmente, es una realidad que el equipo se está quedando sin armas. Kyle Pitts es un talento generacional único, pero en cuanto a receptores, con la sanción a Ridley y la partida de Russell Gage, Olamide Zaccheaus, quien en 2021 registró tan solo 406 yardas en recepción, es actualmente el proyectado para ser WR1 del equipo, y en primera instancia no parece estar capacitado para ello. Las firmas de Auden Tate y Damiere Byrd son relleno para reforzar la profundidad de una posición que no cuenta con un nombre fuerte como los que tuvo años anteriores con Julio Jones o el propio Calvin Ridley. Ante esto, las opciones de Garrett Wilson o Drake London son para tener en cuenta en el primer día de draft. Sin embargo, la clase de wide receiver es tan profunda que le da la posibilidad a Falcons de abordar esa necesidad con sus dos picks de segunda ronda y los nombres John Metchie III, David Bell o Christian Watson pueden ser opciones muy viables a tener en cuenta.
Por otra parte, reforzar la línea defensiva con un caza mariscales es algo que necesita Falcons hace varios años. En 2021, Atlanta terminó último en la NFL en capturas al mariscal rival con 18 y en esta offseason perdió a Dante Fowler, líder en capturas con 4.5 la temporada anterior. Con Aidan Hutchinson, oriundo de Michigan, y el jugador de Oregon, Kayvon Thibodeaux, considerados como prospectos top 5 de este draft, el tackle de Georgia, Travon Walker, y Jermaine Johnson, egresado de Florida State, urgen como las principales opciones para llegar a Atlanta en este Draft 2022.
Por último, la posición de running back también es muy necesaria de abordar en este draft. Cordarrelle Patterson lo hizo muy bien, pero no es un corredor de poder como estuvo Arthur Smith acostumbrado a tener en toda su carrera en Titans. Además, Mike Davis perdió repeticiones en el equipo y la llegada de Damien Williams no parece ser una solución. La posibilidad de contar con dos selecciones de segunda y otras dos de tercera ronda, son suficiente para pensar que Falcons irá por un corredor que le pueda aportar otra dinámica a la ofensiva. Allí, los nombres de Kenneth Walker III, Isaiah Spiller, Brian Robinson Jr o Breece Hall son opciones que Arthur Smith debe estar viendo con mucha atención.
Mi relación con la NFL comenzó hace 10 años gracias a un juego de Falcons ante Saints que se decidió en overtime a favor de Atlanta. Aquella temporada, Green Bay daba la sorpresa ante Steelers en el Super Bowl XLV. Ese vínculo creció tan rápido que decidí formar parte de la familia de NFL Vavel. Hoy, junto a varios de ellos, decidimos crear No Huddle con la idea de seguir creciendo.
