Ya pasó el Draft 2022, y con él se fue la primera parte de la temporada baja más movida de la historia reciente de la NFL. La mayoría de los equipos ya tiene un panorama bastante claro respecto a su situación de cara a la próxima temporada. Sin embargo, San Francisco 49ers es una de las excepciones: el futuro de dos de sus jugadores más importantes, Deebo Samuel y Jimmy Garoppolo, todavía no está resuelto.
Apenas se consumó la derrota frente a Rams en la NFC Championship, ningún fanático del conjunto de la Bahía esperaba que a partir de allí comenzara una temporada baja tan turbulenta. El rumbo parecía más que claro: era hora de traspasar a Jimmy Garoppolo, para de esta manera deshacerse de un contrato alto y a la vez darle las riendas de la ofensiva a Trey Lance, jugador por el que la front office pagó mucho capital de draft. Nadie parecía cuestionar esta decisión, e incluso los primeros reportes aseguraban que el movimiento se haría tan pronto comenzara la agencia libre. Incluso el propio Garoppolo, en la conferencia de prensa posterior a la caída frente a Los Angeles, había dado a entender que esa había sido su última temporada vistiendo el rojo y dorado.
Con el correr de las semanas, los candidatos a quedarse con el mariscal de 30 años empezaron a reducirse. Tom Brady volvió a Tampa Bay Buccaneers, Indianápolis Colts se hizo con Matt Ryan y Washington Commanders adquirió a Carson Wentz, por citar algunos ejemplos. De a poco, la idea de que Jimmy jugara una temporada más en San Francisco empezó a tomar más fuerza. Además, hace poco se conoció que el jugador necesitará someterse a una cirugía de hombro derecho, lo que parece haber bajado su valor en el mercado. Hoy, aunque todavía suena en Carolina Panthers y Houston Texans, todo parecería apuntar a que Jimmy G estará en el roster de 49ers cuando empiece el training camp. Eso sí, a diferencia de hace un año, quien seguramente ocupe el puesto de mariscal titular en la Semana 1 será Trey Lance. El jugador de segundo año tendrá el deber y la oportunidad de demostrar que está listo para ser el QB1 de un equipo de la NFL.
Por el momento, Jimmy Garoppolo sigue con el equipo. En unos meses cuando pueda lanzar, su futuro se dará. Tuvo una operación en su hombro. @49ers #49ers
— Jesus Guillermo (@jesusguillermo) May 1, 2022
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Dicho todo esto, la novela de Garoppolo lejos estuvo de ser el foco principal de atención en la offseason de San Francisco. Y es que fue la situación de Deebo Samuel la que tomó un giro aún más inesperado en medio del caos que fue la agencia libre de la NFL. Situándonos de nuevo en marzo, se esperaba que también iniciaran las conversaciones para buscar una extensión de contrato a la principal arma ofensiva de este equipo. Con el correr de los días, no solo no se llegaba a un acuerdo, sino que el valor de los contratos de los wide receivers se disparaba con las firmas de Christian Kirk en Jacksonville (4 años, $84 millones), Davante Adams en Raiders (5 años, $141 millones) y Tyreek Hill en Dolphins (4 años, $120 millones). Incluso se había filtrado que New York Jets seguía de cerca la situación de quién fuera elegido por su actual franquicia en el Draft 2019. Para colmo, Samuel dejó de seguir a la cuenta de 49ers en las redes sociales, lo que dio lugar a más tensión e incertidumbre.
La situación terminó de explotar cuando Samuel pidió ser traspasado sin dar razones específicas. No parecía ser un problema de dinero, como se especulaba en un principio: la gerencia ya se había mostrado dispuesta a pagarle el contrato que merecía, aunque la realidad es que nunca habían llegado a un acuerdo. A partir de ahí, una catarata de rumores invadió las redes: algunos decían que Deebo no estaba contento con su rol de “wide back”, otros que simplemente quería jugar cerca de su casa (Carolina del Sur). El propio jugador se encargó de desmentir todo en las redes.
Y ahí sí: varias franquicias mostraron interés, pero finalmente casi ninguna apretó el gatillo. Parecía que en la noche del draft San Francisco se desharía del receptor para conseguir, como mínimo, seleccionar en la primera ronda. No fue así: Jets ofreció el pick 10, pero John Lynch dijo no. La intención de la franquicia es clara: quieren retener a su WR1 y uno de los principales responsables de que el equipo de la NFC Oeste haya estado tan cerca de jugar un nuevo Super Bowl. Pasado el draft, las aguas de a poco se fueron calmando e incluso Samuel volvió a seguir al equipo en las redes. ¿Significa esto el fin de la polémica? Para nada. Aunque Deebo juegue la próxima temporada en San Francisco, luego será agente libre, y si no llega la extensión entonces será difícil volverlo a ver en el equipo luego del 2022. Para colmo, la front office todavía debe lidiar con asuntos que, aunque parecen menores, también son de importancia. ¿Qué harán si el center Alex Mack decide retirarse? ¿Traerán de vuelta al safety Jaquiski Tartt, hoy agente libre? La temporada baja de 49ers está lejos de haber terminado.
Redactor y editor de la página web de No Huddle. Cubre la NFL desde 2021. Especialista en San Francisco 49ers.
