La leyenda, el hombre récord, The Comeback Kid, el mejor de toda la historia, Tom Brady finalmente colgó los botines y decidió dejar la NFL dos décadas después de haber llegado.
Con 45 años y montones de premios, victorias y derrotas se podría hacer un artículo de cada año en que formó parte de los rosters de New England y Tampa Bay sobre las hazañas que este hombre a logrado en esta liga, a la que ha dignado de gracia, coraje y éxito por tanto tiempo.
¿Por donde comenzar a mencionar cada récord que ha conseguido? No hay una forma correcta de hacerlo realmente, más que simplemente mencionarlos y extenderse un poco en los más importantes.
Tom Brady showing off all his Super Bowl rings 🐐 pic.twitter.com/c95jGyE3RL
— B/R Gridiron (@brgridiron) July 23, 2021
TB12 es el único jugador en toda la historia en ganar siete Super Bowls, sí, 7 Ganó 6 con los Patriots de AFC y 1 con los Buccaneers luego de cambiarse de lado y saltar a la NFC. El primero lo obtuvo en su segunda temporada como profesional, en la que tomó las riendas luego de la lesión de Drew Bledsoe en la semana 2 de la temporada regular y jamás miró hacia atrás. Venciendo al Greatest Show on Turf de los St. Louis Rams en el Super Bowl XXXVI. El segundo llegaría en la 4ta. temporada del GOAT en la que se comenzó a ganar ese apodo, ya que no sólo venció a los Panthers en el Super Bowl XXXVIII, sino que regresó la próxima temporada para hacerlo de nuevo ante los Eagles de Andy Reid en el Super Bowl XXXIX.
Pasarían 10 años hasta que Brady volviese a obtener otro galardonado anillo en el Super Bowl XLIX ante los Seattle Seahawks (si bien estuvo cerca en dos ocasiones, aunque Eli Manning y los Giants no se lo permitieron), uno de los partidos más increíbles de la historia aunque no tan increíble como la siguiente victoria del hombre de San Mateo, California en el Super Bowl LI donde Brady consiguió una remontada épica en el famoso 28-3 vs. los Atlanta Falcons. Los Patriots volverían a la gran final las dos temporadas siguientes de forma consecutiva, perdiendo una y ganando en la otra final en el amargado Super Bowl LIII ante los Rams. Brady se iría de Boston al sur para la temporada 2020, y en su mejor estilo el equipo de Florida ganaría el Super Bowl LV asegurandole a Brady que si un día quiere ponerse todos sus anillos solo tendrá tres dedos libres. No solo eso, sino que en 5 de las 7 ocasiones en que levantó el trofeo, también se llevó a casa el premio de Super Bowl MVP.
Increíblemente, de sus tres temporadas en que Brady recibió el premio a Jugador Más Valioso del año en ninguna de ellas ganó el trofeo máximo, si bien en 2 llegó al Super Bowl donde perdió ante los equipos de la NFC Este: Giants y Eagles.
El primer MVP lo obtuvo en la mágica y casi inmaculada temporada del 2007 en la que los Pats viajaron al Super Bowl invictos, con un TB12 que lideró la NFL en todas las estadísticas como pasador y rompió el récord de más pases de touchdown en una temporada con 50 (luego sería rebasado por Peyton Manning). En la temporada en que ganó su segundo MVP, Brady rompería el récord de pases consecutivos sin una intercepción con 335 y lideraría la liga en rating de pasador y pases de touchdown, perderían en la ronda divisional ante los New York Jets de Mark Sanchez.
Su tercer y último MVP llegaría diez años después del primero, en donde lideró la liga en yardas por aire, rompió cinco récords, dos de temporada regular: más victorias como QB en temporada regular y más victorias de un QB sobre un mismo equipo (Buffalo Bills), los récords de postemporada fueron todos relacionados al Super Bowl: más intentos de pase, más pases completos, más yardas por aire y más touchdowns lanzados en una carrera, más apariciones de un dúo de QB y Coach (junto a Bill Belichick) y más yardas por aire en un Super Bowl con 505.
Brady logró muchos más récords, que voy a enlistar ahora. Aunque se pueden resaltar los de: más victorias para un mariscal de campo, QB más veterano en liderar la liga en yardas aéreas, más pases de touchdown, más yardas aéreas para pase en la carrera, entre MUCHOS otros. Y estos son simplemente algunos adornos de una carrera tan legendaria e inolvidable que no hay palabras que la puedan describir más que: el mejor de la historia.