Los Raiders están enviando a la banca a Derek Carr por el resto de la temporada, quién fuera el mariscal de campo titular del equipo desde 2014, según anunció el miércoles el entrenador de primer año Josh McDaniels. Jarrett Stidham, adquirido en un intercambio de temporada baja de los New England Patriots, comenzará contra los San Francisco 49ers el domingo en el Allegiant Stadium, y el agente libre novato no reclutado Chase Garbers será el suplente.
Carr y los Raiders acordaron que se alejará del equipo por el resto de la temporada regular para no ser una distracción. Fue el único jugador activo de los Raiders que no entrenó el miércoles, y el equipo enumeró su ausencia como "no relacionada con lesiones, personal". Carr, que tiene prácticamente todos los récords de pases en la historia de la franquicia, había firmado una extensión de contrato por tres años y US$121.5 millones en la primavera, pero podría ser cortado por un monto de $5.625 millones en el tope salarial si el movimiento se hace dentro de los tres días del Super Bowl. Su salario de US$32.9 millones para el próximo año y US$7.5 millones de su salario de 2024 estarían totalmente garantizados en caso de que se lesione.
Los Raiders hicieron este movimiento en parte para mantener la salud de Carr y mantener abiertas sus opciones esta offseason, incluso para un posible intercambio. Las fuentes señalaron que la opción de que Carr regrese en 2023 todavía está sobre la mesa. Carr ha tenido problemas en su primera temporada bajo el nuevo régimen de McDaniels y el gerente general Dave Ziegler de los Raiders. El mariscal tiene 14 intercepciones, la más alta de la NFL y la más alta de su carrera, y su índice de pasador de 86.3 es el más bajo desde su temporada de novato.
Raiders QB Jarrett Stidham to start rest of season. pic.twitter.com/bn4ecmMWdC
— NFL (@NFL) December 28, 2022
Desde el momento en que Carr firmó su extensión con los Raiders en abril, él y su representación tenían que estar preparándose para esta posibilidad. No estoy seguro de que este acuerdo tuviera sentido en ese momento para Carr, quien podría haber jugado el último año de su contrato en 2022 y llegar a la agencia libre, obtener una etiqueta de franquicia o firmar un nuevo acuerdo con mucha más influencia.
Ahora, para permanecer en ese contrato, necesitará encontrar un equipo que se adapte a sus gustos y que esté dispuesto a darle a los Raiders un capital de draft significativo para cerrar un trato. Podría tener más sentido para los Raiders simplemente conformarse con la mejor oferta posible en lugar de insistir en una compensación más significativa, pero los equipos no son particularmente lógicos cuando se trata de canjes de mariscales de campo.
Carr tendrá un mercado en su contrato existente, y aunque es poco probable que obtenga tanto dinero garantizado como un agente libre, tendrá más equipos interesados si no tienen que adjuntar selecciones de draft para adquirirlo. Puede haber un término medio en el que un equipo intercambie una selección para adquirir a Carr y le otorgue un nuevo contrato o reestructure su acuerdo actual. De cualquier manera, si quiere jugar en 2023, tendrá una oportunidad en alguna parte.
Cambiar a Carr le daría a los Titans un mariscal de campo con un contrato un poco más caro, pero conseguirían a un jugador más exitoso con un mejor historial de jugar bien y permanecer en el campo. No está claro si los Titans traerán de regreso a Downing en 2023, pero si lo hacen, tendría sentido un reencuentro entre el ex coordinador ofensivo de los Raiders y el mariscal de campo. Tannehill, quien probablemente se perderá el resto de la temporada debido a una lesión en el tobillo, parecía un seguro para regresar a Tennessee la próxima temporada, aunque solo sea por un año más; ahora, su futuro parece mucho más incierto.
Si bien los Falcons podrían hacer un movimiento por Carr, me pregunto si este movimiento hace más probable una reunión entre Tannehill y el ex coordinador ofensivo de los Titans, Arthur Smith, en Atlanta. La mejor racha de Tannehill llegó con el entonces desconocido Smith como su coordinador ofensivo con los Titans en 2019 y 2020, y el ex receptor abierto universitario ayudó a impulsar la carrera de Smith hacia una oportunidad como entrenador en jefe.
Ningún equipo de la liga está pidiendo a gritos un mariscal de campo superior al promedio que los Jets, que han presentado una de las mejores defensas de la liga en los últimos tres meses. Gang Green no ha tenido un pasador titular en 12 juegos con un índice de pasador superior al promedio en temporadas consecutivas desde Ken O'Brien en 1990 y 1991. O'Brien es el único que lo ha hecho desde que Joe Namath se fue de la ciudad.
Los Jets han intentado todo tipo de soluciones para resolver sus problemas, por supuesto. Además de importar a los veteranos Brett Favre y Vinny Testaverde, su táctica más reciente ha sido utilizar selecciones de los tres primeros en los mariscales de campo, solo para que Sam Darnold y Zach Wilson no estén a la altura de las expectativas.
Periodista deportivo especializado en gráfica. Sigue la NFL desde el 2002 y el College Football desde 2014. Es redactor en No Huddle desde 2020.
