Nos acercamos a una de las fechas más importantes del calendario de la NFL: el draft. El jueves 29 de abril se llevará a cabo la primera ronda, continuando hasta la finalización del evento el día sábado.
En No Huddle analizaremos los prospectos más interesantes de una camada plagada de talento en varias posiciones. En el día de hoy, Trey Lance, uno de los mejores mariscales de la clase.
Bien construido para la posición, aprovecha sus capacidades físicas en su juego por tierra. Es difícil de bajar a Lance en campo abierto, no solo por su correcta elusividad sino que también por tratarse de un jugador fuerte. Buena visión con el ovoide en las manos.
Uno de los mejores brazos de la clase. Lance tiene la capacidad de poner en aprietos a la defensiva rival con pases en profundidad, y no pierde precisión en lanzamientos de más de 20 yardas. Durante su estancia en NDSU se lo vio muy cómodo a la hora de probar en largo.
Su talento en el brazo lo vuelve un cirujano a la hora de ubicar el balón en cualquier sector del campo. Capaz de realizar todos los tiros, a pesar de que en la universidad no se le pedía variedad en sus pases. Puede mejorar en el espiral, lo que hará que los receptores tengan una mayor posibilidad de ganar yardas después de la recepción.
Tal vez su parte más verde. Titular por tan solo una temporada (y un partido en 2020), aprovecha los matchups pero no es particularmente bueno leyendo el juego, ni antes ni después del snap. La experiencia le dará seguridad, pero para sobrevivir en la NFL deberá dejar de tomar la decisión de correr antes que pasar.
No tiene el mejor ball placement en esta clase (tampoco es malo), pero me encanta todo lo demás. Sus pies en el dropback, la manera en que congela al safety para abrir la ruta de su TE y su poise. No apura el lanzamiento aunque le esté llegando la presión. Esto es una rep NFL. pic.twitter.com/FqgV2qvDFU
— Rubén Ibeas (@Rubenibg) February 28, 2021
Desarrollado a pesar de su experiencia, Lance no tuvo ningún turnover en su contra en su primer año como titular, aunque dejó dudas en este aspecto de su juego en el único encuentro que los Bisons jugaron el año pasado. La manera en que cuida el ovoide le facilitará su traslado al siguiente nivel.
Muy calmo entre tackles. No se apresura a tomar decisiones cuando tiene la presión encima y mantiene sus ojos en el campo. Su trabajo de pies está pulido, aunque la expresión corporal parece ser la de buscar la jugada por tierra en buena parte de los snaps.
Comparación: Josh Allen
Proyección: Top 10
Sin dudas, el nombre de Trey Lance es uno a seguir en la noche del draft. Tras tener una de las mejores temporadas que un mariscal ha jugado en la historia de la Division I, el ex NDSU decide ir a la NFL siendo tan solo un redshirt sophomore y con poco más de diez encuentros en su historial. Esta pequeña muestra le da a los scouts algunas realidades de lo que puede llegar a ser, pero poca información sobre dónde está parado realmente hoy el prospecto.
Su piso no será tan sólido, y de manera casi unánime, el pensamiento más acertado con él es que deberá pasar un año sentado en la banca. Pero la capacidad de hacer jugadas grandes constantemente y el talento natural que tiene, hacen que uno solo pueda solo enamorarse del futuro que tiene por delante.
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Técnico Superior en Periodismo. Cubre la NFL desde 2018. Co-Founder, CEO y Director Periodístico de No Huddle, el medio más grande de fútbol americano en Sudamérica. Conduce Mates y Football y es editor principal de la página web.
